El Colegio de Economistas de Málaga se ha mostrado optimista ante la salida de la crisis económica. De hecho, aunque manteniendo siempre cierta cautela, ha asegurado que ésta se encuentra "agotada", fijando el segundo semestre de 2014 como fecha para que el crecimiento alcance "velocidad de crucero".

"Casi todos los indicadores son positivos y parece que en 2014 empezaremos con crecimientos igualmente positivos, que irán en aumento, sobre todo a partir del segundo semestre", ha manifestado este viernes el decano del Colegio de Economistas, Juan Carlos Robles, durante la presentación del barómetro económico de la provincia de Málaga correspondiente al tercer trimestre de 2013.

En este sentido, ha apuntado que, "aunque seguirá habiendo millones de puestos de trabajo destruidos, que no se recuperarán, estamos ya en el punto de inflexión y empezamos a notar los primeros síntomas de esa recuperación", destacando aspectos como el aumento de las pernoctaciones hoteleras, de los turismos matriculados y de las viviendas vendidas.

"Ahora mismo esto se traduce en confianza por parte de la gente, es un factor aún subjetivo, pero favorece la economía, y en unos meses eso empezará a notarse en los bolsillos", ha indicado el representante de los economistas malagueños.

Como elementos negativos, desde el Colegio de Economistas sí han mencionado otros aspectos, como el aumento cada vez mayor de los concursos de acreedores, que las exportaciones no consigan crecer o que el número de afiliados a la Seguridad Social descienda.

Sector servicios

Respecto a los sectores que liderarán la recuperación en la provincia, Robles ha dejado claro que "serán los mismos por los que hemos caído", en tanto que "en Málaga el tejido productivo que tenemos es el que tenemos, basado en los sectores inmobiliario y de servicios".

Sobre el turismo en la provincia de Málaga, el decano sí ha valorado que sea "una gran industria, muy profesionalizada", a diferencia del sector inmobiliario antes de la crisis, "que estaba lleno de oportunistas".

Consecuencia de ello, ha precisado Robles, es que el sector turístico se ha visto menos dañado por la crisis económica, "habiendo sabido adaptarse a la situación".

Asimismo, ha especificado que no habrá un cambio de tipo productivo, sino que, después del "palo" vivido, la modificación del modelo pasará por "hacer a las empresas más eficientes". Una consecuencia de ello es que estarán en mejores condiciones para salir al exterior y, por ello, se empezará a exportar más.