Esa simplificación, ha detallado el consejero de Presidencia y Administraciones Públicas, Leandro Esteban, se conseguirá reduciendo plazos y eliminando trabas, e instaurando el silencio en la Administración como silencio positivo, de tal manera que en el caso de que no se conteste a una solicitud deberá entenderse como admitido lo que los ciudadanos hayan demandando.

Una línea en la que el Ejecutivo autonómico pretende continuar —la de reducir plazos— ya que este jueves se da el primer paso "pero no un paso cualquiera, no es el último, y habrá que seguir avanzando en la senda de menos tiempo en resolución de expedientes de solicitudes y más solicitudes que terminen con silencio a favor de la pretensión de los ciudadanos".

El ponente del dictamen del texto, el 'popular' José Manuel Latre, ha explicado que el texto regula 177 procedimientos para los que se establece el silencio administrativo desestimatorio, 48 procedimientos con plazo de resolución superior a seis meses y aquellos en los que, teniendo un plazo de resolución igual o inferior a seis meses, tienen sentido estimatorio fijado o por la Administración regional o por normativa básica estatal.

"Una administración moderna tiene que estar al día reduciendo los trámites que no sean necesarios, la administración no debe ser obstáculo para el ciudadano", ha dicho Latre, que ha valorado que con esta norma se reducirá en un 59% el número de procedimientos.

Enmiendas "asumibles"

Desde el PSOE, el parlamentario Luis Santiago Tierraseca, que ha defendido las cuatro enmiendas que quedaron vivas tras su paso por la Comisión correspondiente, ha argumentado que las mismas son "asumibles" por el Ejecutivo, dado su carácter técnico y jurídico.

Además, ha incidido en que en ellas se recogen observaciones realizadas por el Consejo Consultivo, como la "falta de concordancia en los criterios de agrupamiento del texto", o que en la exposición de motivos no parezcan justificadas las razones que justifican los fines de la nueva norma.

Desde el Partido Popular, el diputado Vicente Giménez ha pedido al PSOE que recogiera la "mano tendida del Gobierno", a fin de ir "todos por la misma senda para que la administración resuelva los problemas" y hacer que esta norma sirva de "atractivo" para los inversores, y que ven en Castilla-La Mancha un lugar donde invertir.

Finalmente, PP y PSOE se han puesto de acuerdo en apoyar este texto, después de que, tras un receso para alcanzar el consenso, los 'populares' han aceptado las enmiendas 4 y 5 de los socialistas, y estos han decidido retirar sus enmiendas 1 y 2, un apoyo que el consejero de Presidencia ha agradecido a ambos grupos desde su escaño.