La Policía Nacional de Burgos ha detenido a tres personas con iniciales M.A.R., de 26 años; F.R.G., de 20, y la mujer D.L.P., de 21 años, todas ellas con numerosos antecedentes delictivos, como presuntas autoras de un delito de extorsión mediante un falso secuestro, según informaron fuentes de la Subdelegación del Gobierno.

Las investigaciones se iniciaron el pasado día 13, tras la denuncia presentada en Comisaría por el padre de uno de los jóvenes. Al parecer, había recibido una llamada telefónica de un amigo de su hijo, al que conoce por ser compañero de piso de éste, en Gamonal, comunicándole que unos delincuentes procedentes de Europa del Este se lo habían llevado a la fuerza del piso, además de darle una paliza.

El padre fue al lugar para entrevistarse con este individuo, el segundo de los detenidos, quien le mostró un vídeo grabado en un teléfono móvil en el que se veía al joven "secuestrado" en el suelo, con los ojos amoratados, mientras era pateado por dos personas y pedía auxilio. Según dijo este joven, los secuestradores pedían un rescate de cuatro mil euros para liberarle.

La Policía sospechó de que podía tratarse de un falso secuestro en el que estaría implicado el propio secuestrado, que lo que pretendía era sacar dinero a su padre en un plan urdido con sus amigos y compañeros de piso.

El padre de la supuesta víctima acudió al día siguiente, en una segunda ocasión, al piso, donde el compañero de su hijo, que estaba acompañado de su novia y de otra persona, le dijeron que los secuestradores habían reducido la cantidad exigida a tres mil euros primero, y a mil después.

Finalmente, el joven fue "liberado" y contó a su padre que tenía deudas con gente peligrosa y que por eso le habían secuestrado y que le habían amenazado con matarle si no se las pagaba, lo que también resultó falso.

La Policía detuvo a los tres implicados y pudo saber que el presunto secuestrado se había autolesionado para que resultaran creíbles las imágenes del vídeo.