El presidente de la República, Hugo Chávez Frías, denunció que Estados Unidos tiene planes para invadir Irán y advirtió que si lo hace "expandiría la crisis hasta límites insospechados".

Chávez aseguró que el plan de invasión y ataque a Irán está listo y reiteró que esta acción sería "una locura 100 veces más grande que la locura de invadir Irak".

Asimismo, acusó a Estados Unidos de mantener bajo amenazas latentes a Cuba, Venezuela y Bolivia.

"Ellos seguirán amenazando a cualquier pueblo que decida ser libre y tomar su propio rumbo", dijo.

En cuanto a las recientes declaraciones del presidente de Estados Unidos, George W. Bush, y del subsecretario de Estado de Estados Unidos, John Negroponte, Chávez subrayó que ambos son unos "criminales de guerra" y "deberían ser enjuiciados y encarcelados por el resto de sus días".

Chávez acusó a ambos de producir muertes en la guerra de Irak y de dañar el medio ambiente.

"Son criminales los dos, deberían ser enjuiciados y metidos a prisión por el resto de sus días, el Bush y el Negroponte y la mafia que se entronizó en el poder en Estados Unidos", reiteró.

Recuerdo de la rebelión

Por su parte, el Parlamento de Venezuela (Asamblea Nacional) aprobó por unanimidad de los diputados, todos afines al presidente, conmemorar el próximo domingo con una sesión parlamentaria especial la intentona militar que lideró éste el 4 de febrero de 1992.

Chávez ha dicho a su vez que conmemorará con un desfile militar el 15 aniversario del fallido golpe de Estado contra el presidente de la época, Carlos Andrés Pérez, y reveló que ha autorizado a sus compañeros de armas de entonces, cuando él era teniente coronel del Ejército, a vestir ese día el uniforme militar.

El diputado Raúl Álvarez Bracamonte, capitán de Ejército cuando ese día participó en los hechos, dijo que "la rebelión del 4 de febrero de 1992 partió en dos la historia del país y convirtió al pueblo venezolano en actor y juez de su propio destino".

"De esta valerosa acción militar surgió el liderazgo que hoy representa el presidente de la República y el nacimiento de una nueva República, por la que luchan hoy de forma conjunta civiles y militares", sostuvo el ahora legislador socialista al proponer la realización de la sesión parlamentaria especial acordada.

La Asamblea Nacional aprobó simultáneamente un acuerdo que exhorta a las instancias legislativas regionales a realizar ese día en cada región del país "un homenaje póstumo a quienes ofrendaron sus vidas en estos acontecimientos", oficialmente 14 militares y civiles y alrededor de medio centenar, según la prensa de la época.

Chávez ha dicho que la acción militar de ese día comenzó a gestarse tres años antes, cuando Pérez ordenó a los soldados reprimir con sus armas la revuelta popular conocida como el "Caracazo", desatada tras decretar diversas medidas económicas, que incluyeron un alza de los precios de la gasolina que luego anuló.

En la sesión parlamentaria celebrada el día siguiente para evaluar la situación, el diputado y posterior presidente del país Rafael Caldera criticó a Pérez y desestimó su interpretación de que los alzados querían asesinarle, lo que le valió una popularidad que le permitió ganar unas posteriores elecciones presidenciales.

Chávez y los demás militares involucrados fueron juzgados y sentenciados por rebelión, pero una vez en el poder Caldera los indultó, en 1994.