La vicesecretaria de Organización del Partido Popular andaluz, Ana Corredera, ha criticado que la presidenta de la Junta, Susana Díaz, no haya dicho "ni mú" después de haber quedado "acreditado" que todos los consejeros del Gobierno autonómico entre 2005 y 2007 "conocían" los informes de la Intervención General que señalaban "irregularidades" en el procedimiento de concesión de expedientes de regulación de empleo (ERE), tal y como denunció públicamente ayer en el Pleno del Parlamento andaluz el presidente de su partido, Juan Ignacio Zoido.

En rueda de prensa, Corredera ha dicho que el PP-A sigue esperando "la reacción" de Díaz ante la "gravedad" de los hechos que ponen en evidencia estos informes de la Intervención General y a los que los 'populares' han tenido acceso al ser parte personada en el caso Invercaria, un caso que considera "primo hermano" del de los ERE.

"Hoy sabemos que todo el Consejo de Gobierno conocían las irregularidades que se estaban produciendo; que conocían los informes de la Intervención. Hoy se ha desenmascarado a este Gobierno y todavía nadie ha dado ninguna explicación", ha lamentado la dirigente 'popular' para urgir a la "presidenta que iba a ser implacable con la corrupción" a aclarar si ella también "sabía" de estos informes ya que ayer no le contestó a Zoido en su 'cara a cara' parlamentario.

Ante ello, Corredera ha anunciado que el PP-A va a pedir auditorías de todas las empresas públicas "que utilizaron ese sistema irregular y que están señalados por la Intervención", con el deseo de que "esta vez" la Junta apoye su solicitud para que de verdad se pueda "conocer en profundidad lo que ha estado ocurriendo en los ERE, en Invercaria, en Bahía Competetitiva o con los fondos de formación".

Sobre todo, ha insistido, porque los documentos de la Intervención General "acreditan que en los despachos de San Telmo se planificó y se orquestó un sistema de corrupción para utilizar de forma fraudulenta el dinero de los andaluces".

Tras recordar que esta alerta no procedió sólo de la Intervención General de la Junta sino que también la Guardia Civil en su investigación "dijo que era una trama y un sistema ideado que conocía todo el Consejo de Gobierno", Corredera ha reiterado que Díaz no puede permanecer en silencio ante estos hechos después de demostrarse "con documentos que la trama de los ERE no se produjo al margen del Consejo de Gobierno como han intentado hacernos ver".

"El presidente y los consejeros de la Junta conocían las irregularidades del procedimiento y participaban de él", ha resumido la vicesecretaria del PP-A, quien ha advertido de que, en consecuencia, la "heredera de la Junta", Susana Díaz, debe "heredar también las responsabilidades políticas" de este caso después de que su "mentor", José Antonio Griñán, "se fuera sin darlas". "Si asume el Gobierno, asume también las responsabilidades de lo que ocurrió en ese gobierno", ha apostillado.

A modo de resumen, Corredera ha indicado que el gobierno socialista de los años 2005, 2006 y 2007 "se saltó todos los controles con absoluto desprecio, obvió todas las advertencias de la Intervención de que ese sistema era irregular y de que las ayudas debían de darse con una fiscalización previa".

Por ello, y después de conocer que la Intervención también advirtió de que este sistema "irregular" no se utilizaba sólo en la Consejería de Empleo sino también en las de Agricultura, Turismo, Medio Ambiente, Obras públicas y Presidencia, la dirigente del PP-A ha incidido en que no va a permitir que Díaz "mire para otro lado". "Ha llegado el momento de que dé la cara y de que actúe", ha concluido.