La economía de la Eurozona se ralentiza, pero los analistas no ven la recuperación en peligro

  • El crecimiento del PIB de la zona euro (0,1%) descendió dos décimas en el tercer trimestre, con Francia e Italia en tasas negativas (-0,1%).
  • "Es un dato flojo, pero con un lado bueno: seguimos en tasas de crecimiento por segundo trimestre consecutivo", opina Victoria Torre, de Self Bank.
  • La caída de la actividad en el centro de Europa podría lastrar la recuperación en España, según los analistas consultados por este diario.
El retroceso es similar al del trimestre anterior.
El retroceso es similar al del trimestre anterior.
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El retroceso es similar al del trimestre anterior.

La economía de la Eurozona se ralentizó dos décimas en el tercer trimestre del año y registró un crecimiento de apenas un 0,1% entre julio y septiembre, según los datos preliminares de Eurostat hechos públicos este jueves. Junto a la ya conocida vuelta de España a la senda de la recuperación (un incremento del PIB del 0,1%) los datos muestran que Francia, una de las locomotoras económicas europeas, registró tasas de crecimiento negativas (-0,1%), al igual que Italia.

La "moderación" del crecimiento económico en Europa ha sido algo mayor de lo esperado, tal como reconocen los economistas de BBVA Research, que estiman que a pesar de que la demanda doméstica en su conjunto ha continuado "relativamente resistente", señalan a la mayor caída de las exportaciones netas como responsable de esta peor coyuntura.

En su conjunto, el dato de la Eurozona, si bien no es bueno, entraba dentro de las previsiones de los analistas consultados por este diario, que apuntan más al lado positivo: "Es un dato flojo, pero por lo menos seguimos en tasas de crecimiento por segundo trimestre consecutivo. Se preveía un trimestre complicado, con una recuperación débil. De ahí la bajada de tipos aprobada esta semana por el presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi", explica Victoria Torre, analista de Self Bank, que también vincula esta decisión del BCE con el control de los precios y la prevención de una hipotética deflación.

"Francia vuelve al terreno negativo y por debajo de las expectativas, debido sobre todo a un retroceso de las exportaciones". También han experimentado un bajón las exportaciones de Alemania, la gran potencia económica europea, si bien estas se han visto compensadas con creces por el empuje de su demanda doméstica. "Ha habido aumentos en inversión en equipamientos, en construcción...", señala Torre. La economía alemana, pese a que redujo cuatro décimas su crecimiento respecto al trimestre anterior, se ha mantenido "en línea con esperado", según las conclusiones de los equipos de estudio de BBVA.

¿Consecuencias para España?

El hecho de que la economía europea no acabe de recuperarse podría suponer para España una ralentización de la recuperación económica, que sin embargo los analistas consultados por 20minutos.es dan como un hecho. "Hay dos caminos de salida de la crisis. Por un lado, Alemania, que ha compensado con su demanda interna la caída de las exportaciones", opina Torre.

"Por otro lado, está España, que debido a la situación de su economía no podría salir gracias solo a su mercado interior, por lo que dependerá en parte de la evolución del resto. En este sentido, ya se esperaba que en este contexto cualquier incremento de la actividad sería débil", concluye. En el último informe del servicio de estudios del banco francés BNP Paribas, por su parte, se muestran optimistas y sostienen que, a la vista de los datos globales, "una ligera aceleración en el cuatro trimestre es posible. La volatilidad que ha afectado a los últimos dos trimestres debería desaparecer", opinan.

Aún así, desde la entidad francesa creen que la recuperación está lejos de ser un sendero sólido y sostenido: "Varios lastres dificultan la recuperación actividad: un perezoso crecimiento del crédito, una demanda débil, altos niveles de desempleo, un proceso de desapalancamiento aún en desarrollo y la incertidumbre sobre el futuro", reconocen desde BNP Paribas.

Para España, la falta de una recuperación en el conjunto de Europa no es una buena noticia, ya que gran parte del crecimiento está llegando gracias a las exportaciones (turismo, por ejemplo). El hecho de que la Eurozona volviera a una senda recesiva lastraría la capacidad de la economía española de colocar sus productos y servicios en el exterior.

Sin embargo, tal como señalan los analistas del Servicio de Estudios de La Caixa en su último informe mensual, el consumo privado en España parece que va ganando apoyos, por lo que no todo se tendría que fiar a la demanda exterior. "Por un lado, la estabilización del mercado de trabajo ayudará a detener el retroceso de la renta disponible de los hogares (...) El consumo privado también cuenta con otro tipo de soportes, como la extensión del Plan PIVE", añaden desde La Caixa.

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