Un estudio, elaborado por esta comisión, revela que la probabilidad de tener un siniestro en el primer año de carné es cinco veces superior a la de un conductor experimentado.

La experiencia es un grado, por eso la comisión recomienda que los jóvenes puedan conducir a los 17 años con un adulto al lado.

Esta conducción tutelada, que debería ser regulada con detalle, permitiría a los jóvenes adquirir experiencia antes de obtener la licencia. «Sabemos que es una medida polémica, pero está dando buenos resultados a otros países, como el Reino Unido o Suecia», dijo ayer el director de Comunicación del RACC, Josep Maria Miret.

Por otra parte, los expertos también pidieron modificar y reforzar el examen para conducir ciclomotores, y fijar una tasa de alcohol cero para los conductores noveles.

Coste millonario

La vida y el dolor no tienen precio, pero lo cierto es que los accidentes de tráfico de los jóvenes cuestan cada año 4.174 millones. Esta cifra supone el 0,48% del PIB y el 50% del coste total de los accidentes de tráfico.

El estudio desglosa este cálculo en 50,8 millones de costes policiales y servicios de emergencia, en 60 de gastos sanitarios, en 243 de secuelas por discapacidad, en 1.676 de daños materiales y en 2.144 por la pérdida de las rentas de las víctimas.

Un dato: cada joven que resulta inválido grave por un accidente supone un gasto de dos millones al año.

Todo el estudio del racc en www.20minutos.es

Los chicos, peor que las chicas

Los chicos tienen una tasa de mortalidad cinco veces mayor que las chicas. Los jóvenes representan en España el 20% de la población, el 30% de los muertos en carretera y el 40% de los heridos graves. Según el estudio, la probabilidad de que un joven muera en España por un accidente de tráfico es el doble que en Holanda. Otra conclusión del informe es que el 60% de los siniestros de los jóvenes ocurre entre viernes y domingo, y la mitad de estos, de madrugada.