La presidenta del PP vasco, Arantza Quiroga, ha registrado una interpelación en el Parlamento autonómico en la que insta al lehendakari, Iñigo Urkullu, a informar sobre si tiene previsto liderar un "reproche social permanente" contra los presos de ETA excarcelados como consecuencia de la sentencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) contra la 'doctrina Parot'.

Quiroga, en el texto de la interpelación, denuncia que las excarcelaciones de terroristas que no han mostrado "arrepentimiento alguno" generan "un inmenso dolor y desconcierto social".

Los reclusos están siendo excarcelados tras el fallo del TEDH, que considera que la aplicación de la 'doctrina Parot' —que alarga el tiempo de estancia en prisión de los reclusos a los que se les aplica— vulnera el principio de irretroactividad de las normas penales perjudiciales para el reo.

Ante esta situación, Quiroga se pregunta "cómo afronta esta sociedad la aparición de terroristas con tantos asesinatos a sus espaldas, que no se han arrepentido, y qué papel juegan las instituciones para garantizar un progreso moral".

SENSIBILIDAD

La dirigente popular estima que "hoy más que nunca es necesario subrayar desde las instituciones vascas los principios de libertad y justicia". No obstante, ha lamentado que tras la excarcelación de la presa Inés del Río, en aplicación de la mencionada sentencia de la Corte Europea, el portavoz del Gobierno vasco, Josu Erkoreka, "mostró su satisfacción por el fallo, sin mostrar ninguna sensibilidad pública hacia las víctimas".

"Tenemos la obligación de mirar al futuro con dignidad, llamando a las cosas por su nombre. Nada más equivocado ni perverso que confiar al olvido unos asuntos que han generado tanto sufrimiento", ha advertido Quiroga.

La presidenta del PP en Euskadi ha destacado que "las víctimas nunca dejarán de serlo", pero que es necesario "devolverles la dignidad, reconocerles el daño que se les infirió, pedirles sinceramente perdón, y darles garantías de que no habrá nuevos crímenes que reaviven la memoria de los que ellos o sus familiares, amigos y compañeros, padecieron".

"INDIFERENCIA"

A su juicio, el Parlamento vasco tiene la "obligación" de "quebrar el muro de la indiferencia y la comprensión del daño causado y construir las bases de una convivencia basada en la libertad y en la justicia, en la memoria de las víctimas del terrorismo y en el reproche social hacia quienes alberguen cualquier tentación de recurrir a la violencia o justificación de la misma".

Esto, tal y como ha explicado, "requiere el permanente empeño institucional de amparar a las víctimas del terrorismo y construir las bases de una convivencia plenamente democrática en Euskadi". "No podemos construir nuestra sociedad reforzando una convivencia basada en una doble moral. Además del reproche penal hay una condena social, un reproche social a los asesinos y victimarios de ETA que no prescribirá nunca", ha señalado.

Por todo ello, ha preguntado al lehendakari cuáles son sus propósitos "para liderar el reproche social permanente contra los presos etarras puestos en libertad, que no han mostrado el más mínimo arrepentimiento y que no han reparado el enorme daño causado a sus víctimas y familiares".