El presidente del Cabildo de Tenerife, Carlos Alonso, ha advertido este martes de que la situación económica del Matadero Insular "no es sostenible", y ha pedido a los trabajadores que desistan de la huelga y se "sienten a negociar" para que todas las partes implicadas "hagan aportaciones".

En una rueda de prensa en la que ha dado cuenta de los acuerdos del Consejo de Gobierno, ha reconocido el "mea culpa" en el retraso de las nóminas de octubre, aunque ha aclarado que la previsión es que no haya "más retrasos" y que el salario se abone este mismo martes.

No obstante, ha dicho que el Cabildo solo representa el 33 por ciento de la sociedad, y pese a ello, aporta cada año una subvención de 678.000 euros que en 2013 se ha visto reforzada con unos 700.000 euros adicionales.

Aún así, el déficit anual es de 650.000 euros, y pese a que ha anunciado que el próximo año aumentará la subvención, ha dejado claro que deberán aumentar los ingresos para hacer más sostenible a la empresa.

Por ello, ha comentado que el sector ganadero deberá asumir una "subida de tarifas" y los trabajadores, un ERE temporal que reduce las horas de trabajo con una merma económica que se ve "compensada" por el desempleo. "La alternativa es despedir, pero preferimos hacer el ajuste de esta manera", ha comentado.

Asimismo, ha apuntado que el reparto del Matadero debe externalizarse, con el compromiso de que parte del personal se incorpore al nuevo servicio.

"No es sostenible la situación porque en 2001, el coste total de carne sacrificada valía 25 céntimos y ahora pasa 44, y eso no es viable. La solución no es que el Cabildo pague todo y el ejemplo es Titsa, donde hemos llegado a un equilibrio sin despedir trabajadores a través de la suspensión de horas de trabajo, subiendo tarifas y suprimiendo servicios", ha explicado.