El Gobierno ha anunciado que tiene previsto reformar el régimen de incompatibilidades del Banco de España y lo va a ajustar a la normativa de la Administración General del Estado que impide a un antiguo cargo público incorporarse en dos años a la actividad privada en aquellos sectores donde hubiera tenido responsabilidad.

El ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, ha anunciado esta reforma, que se produce tras conocerse la propuesta de nombramiento del exdirector general de Regulación del Banco de España José María Roldán como nuevo presidente de la Asociación Española de Banca a partir de abril de 2014. No obstante, De Guindos ha asegurado que el Gobierno no entra en la valoración de este nombramiento y "no reacciona en función de cuestiones específicas".

El régimen de incompatibilidades del Banco de España impide la incorporación al mismo sector en un plazo de seis meses, pero, en cambio, el de la Administración General del Estado, al que se va a ajustar, amplía a dos años dicho periodo.

Los principales bancos habían pactado la semana pasada que Roldán ocupara en abril de 2014 la presidencia de la patronal bancaria en sustitución de Miguel Martín.

Fuentes financieras han justificado que el nombramiento del exdirector general de Regulación del Banco de España como presidente de la patronal bancaria era "ético, estético y legal", y han añadido que no veían conflicto de intereses por haber ocupado anteriormente responsabilidades en el organismo supervisor.

Sin embargo, en el Ministerio de Economía piensan justamente lo contrario por el papel clave que Roldán tuvo en la supervisión del sistema financiero español, que acabó necesitando un rescate con fondos europeos, según las mismas fuentes.