Los diputados salieron a las 11.40 hora local (16.40 GMT) del edificio donde se reúne el Legislativo protegidos por la Policía, mientras en la zona se incrementaba el número de manifestantes, partidarios del presidente ecuatoriano, Rafael Correa, que reclamaban la Asamblea Constituyente.

Tras la salida de los legisladores, al mediodía, un grupo de estudiantes arrojaron botellas, piedras y palos contra el edificio del Congreso, forcejearon con la Policía y lograron entrar en sus instalaciones, de donde fueron evacuados minutos después por los agentes que utilizaron gases lacrimógenos para disolverlos.

En los incidentes, una fotógrafa de la Agencia Efe, Cecilia Puebla, resultó herida en la nariz por los manifestantes y tuvo que ser trasladada a un hospital.

El Congreso había iniciado su sesión, pasadas las 10.00 de la mañana para tratar la documentación remitida por el Tribunal Supremo Electoral (TSE) sobre la convocatoria de la consulta popular para la Asamblea Constituyente, que el Gobierno remitió a ese organismo el pasado 15 de enero.

Pîden una Asamblea Constituyente

Una hora después, manifestantes procedentes del cercano Parque del Arbolito, donde se habían concentrado seguidores de grupos políticos, sociales, indígenas y estudiantes, partidarios del Gobierno de Correa, empezaron a llegar a la zona del Congreso, coreando consignas contra los diputados y a favor de la Constituyente.

Los manifestantes también criticaban a los congresistas por haberse elevado ayer el sueldo en mil dólares, tres semanas después de bajárselo y asegurar que sería un periodo legislativo austero.

Ante esta situación, el presidente del Congreso, Jorge Cevallos, decidió, pasadas las 11.30 horas, dar por finalizada la sesión, para "velar por la seguridad física de los diputados", y la Policía decidió sacarlos del lugar por una puerta trasera, para evitar incidentes.

Algunos de los diputados, del Partido Social Cristiano (PSC) y del Partido Renovador Institucional de Acción Nacional (PRIAN), opuestos al Gobierno, responsabilizaron al ministro de Gobierno (Interior), Gustavo Larrea, de lo sucedido.

También responsabilizaron al Gobierno de la situación de "anarquía" e "inestabilidad" en la que, según ellos, vive el país.

En el Tribunal Supremo Electoral, los siete vocales, que hoy tenían que tratar sobre la eventual devolución de los derechos políticos al ex presidente Lucio Gutiérrez, suspendieron la sesión y dejaron los locales, ante el riego de que los manifestantes se dirigieran a ese lugar.

Una fotógrafa herida

Durante la reyerta, una fotógrafa de la agencia Efe, Cecilia Puebla, resultó herida en la cara al ser alcanzada por un objeto -posiblemente un bote de gases lacrimógenos- arrojado contra la fachada del Congreso.

Puebla se encontraba allí para cubrir el desalojo de los diputados.

También han sufrido lesiones leves varios policías.