Las dos aulas de la nueva escuela infantil que Casa Caridad gestionará en Torrent, con capacidad para 30 alumnos, abrirán este martes sus puertas para acoger a los pequeños de entre 1 y 3 años provenientes de familias en riesgo de exclusión social.

Esta misma mañana los padres han mantenido una reunión con la directora del centro, profesoras y la trabajadora social para conocer el funcionamiento de la escuela, sus horarios, sistema de enseñanza y hábitos que se trabajarán con los niños, informan los responsables de la iniciativa en un comunicado.

Esta escuela es totalmente gratuita y no acarrea ningún coste para las familias, ni en concepto de matrícula, comedor, uniformes o material escolar, lo que permitirá a los padres conciliar la vida familiar y laboral o poder buscar activamente empleo en las horas en las que sus hijos permanecen en clase.

La nueva escuela infantil 'Ciudad Jardín' está situada en la calle de Les Albades nº 13, en el barrio de Xenillet, y es de titularidad municipal. Se trata del tercer proyecto de gestión que la asociación asume tras la puesta en marcha de dos comedores sociales para personas necesitadas, uno en la calle Santa Cruz de Tenerife de Valencia, que comenzó a funcionar en octubre de 2012, y otro en Paterna, que se inaugura hoy lunes.

VOLUNTARIAS

La escuela está dividida en dos plantas y cuenta con tres aulas infantiles, comedor, despachos, patio exterior y sala multiusos. A partir de mañana martes los alumnos acudirán de 09.00 horas a 17.00 horas de manera paulatina y en grupos reducidos, para garantizar el periodo de adaptación de los pequeños. A medida que los niños se vayan incorporando a la escuela, también lo harán las voluntarias, por el momento 16 mujeres, que ayudarán principalmente en las labores de comedor.

Casa Caridad cuenta con otra Escuela Infantil en Torrent, en este caso propia, situada en la calle Santa Lucía y que comenzó a funcionar hace ahora tres años. Por sus instalaciones pasan a diario 43 niños.

La peculiaridad de las escuelas de Casa Caridad es que no solo se atiende a los menores y se les procura enseñanza, sino que se trabaja también con las familias a través de la intervención y el trabajo social para mejorar sus condiciones de vida. Además se realiza un seguimiento de cada caso y se les ofrecen actividades formativas a través del programa escuela-familia y herramientas útiles para lograr la inserción en el mercado laboral.