Tras un acuerdo entre la Xunta y el Concello, se va a derribar la actual estación depuradora para construir una nueva soterrada, por lo que ahora sólo falta el visto bueno de la Consellería de Medio Ambiente.
Una decisión que no ha sentado bien a los vecinos, por lo que han decidido salir a la calle. También avisan de que el siguiente paso será asistir a los plenos municipales para mostrar su descontento.
Otros problemas de la zona
Además de la depuradora, los vecinos de Coruxo tienen otros problemas. Denuncian que la mitad de sus fuentes están contaminadas y la necesidad de asfaltado y limpieza de aceras son reclamaciones habituales. También consideran que la cobertura del transporte público es insuficiente.
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