La banca atrapada en Pescanova espera cerrar el convenio de acreedores antes de final de año para hacer frente al 'agujero patrimonial' de 1.667 millones de euros de la firma gallega y que combinará la quita de deuda, la capitalización de pasivo y la entrada de nuevos socios, según han informado a Europa Press en fuentes conocedoras de la situación de la pesquera.

"Las tres palancas que se van a utilizar se centran en la entrada de dinero fresco con nuevos socios, la capitalización de pasivo en acciones y la quita", han explicado.

La compañía gallega, con una deuda de 3.674 millones de euros, está inmersa en reuniones con la banca para lograr que el convenio de acreedores esté listo en los próximos dos meses, una vez que se conozca el plan de negocio que elabora la consultora PwC, que podría estar listo la próxima semana, en el que se determinará la deuda soportable y las necesidades de liquidez de Pescanova.

Según las primeras conclusiones de dicho plan, Pescanova cuenta con capacidad para seguir adelante "sin liquidarse, ni trocearse", sin necesidad de ajustar su estructura en España, y en el caso de que fuera necesario, con la venta de activos o filiales en el extranjero no estratégicas.

Las mismas fuentes han asegurado que la compañía dispone de liquidez para aguantar hasta final de año, sin que existan tensiones de tesorería, ya que la firma está exigiendo incluso a sus clientes el pago al contado y el pago aplazado a proveedores con el fin de "proteger" su liquidez.