El Gobierno vasco, junto a la Diputación foral de Bizkaia y el Ayuntamiento de Turtzioz, ha acudido este jueves al procedimiento de deslinde que ha tenido lugar en el municipio de Turtzioz, donde han mostrado su desacuerdo con relación a la fijación del lugar de colocación de los mojones o hitos definitivos entre Bizkaia y Cantabria.

En un comunicado, han explicado que, a través de las comisiones técnicas, han presentado argumentos tanto jurídicos como técnicos en un acta de disconformidad, para poner en cuestión la forma de ejecución de la sentencia fallada por el Tribunal Supremo.

Según han indicado, no se trata de una cuestión de propiedad, sino de una delimitación territorial que restaría al Territorio Histórico de Bizkaia 400 hectáreas. "La alteración de los límites de los territorios provocará que ese terreno pase a depender jurisdiccionalmente a Cantabria", han advertido.