Y sólo desde hace unos días, ya que los propios facultativos reconocen que la gripe de este año viene con retraso. «Siempre registrábamos un pico en Navidad, pero este año el tiempo ha sido muy bueno y hasta ahora no habíamos tratado ningún caso. Pero lo peor está por llegar», afirma el doctor José Luis Astray, del centro de salud de Labañou. En el de O Ventorrillo, uno de los más saturados de la ciudad, aseguran que esta semana están sufriendo un «auténtico overbooking» al unirse los primeros casos de gripe con los resfriados.

Los síntomas con los que los pacientes llegan a consulta no han cambiado. «Llegan con fiebre, malestar muscular y nos piden antibióticos, pero para la gripe no hay medicación. Lo mejor son las medidas caseras de toda la vida: descanso y muchos líquidos», asegura un médico.

Lo que sí está cambiando es el perfil del enfermo de gripe. Si antes predominaba la gente mayor, ahora son los jóvenes los que más sufren este mal invernal. «Los ancianos se vacunan más», afirman.

Las farmacias no dan abasto

Si los centros de salud están recibiendo casos de catarros y gripe, en las farmacias coruñesas aseguran que ya desde hace unos 15 días les llegan clientes en busca de antigripales, sobre todo «los que anuncian por la tele». «Nosotros les decimos que no se automediquen y que vayan a ver a su facultativo», explica una farmacéutica del centro.