El director del departamento de Asuntos Monetarios del FMI, José Viñals, ha advertido este viernes de que la solución al "drama" del paro en España está en parte en el país y en parte en la Unión Europea y, si se hacen los deberes, existe una posibilidad de que haya una mejoría a lo largo del tiempo. Viñals se ha pronunciado así al ser preguntado sobre la alta tasa de paro en España tras ofrecer la conferencia 'La economía global en transición', en un acto organizado por la Facultad de Economía de la Universitat de València, de la que fue alumno.

"España forma parte de la Unión Europea; la solución del paro está en parte aquí y en parte en Europa, y dedicamos mucho tiempo a ello", ha expuesto ante profesores y universitarios. El proceso de reabsorber la tasa de paro del 26% que existe en España "no va a ser rápido", ha dicho Viñals, quien ha asegurado que la postura del Fondo Monetario Internacional (FMI) en materia fiscal tiene presente el "drama" del paro.

Fue esta institución la que dijo "más alto" que las políticas de consolidación fiscal y de equilibrio presupuestario debían ser "una maratón y no un sprint", y el FMI considera fundamental que la banca tenga capacidad de concesión de crédito, de ahí que se haya urgido al sistema bancario a lograr la solidez.

Viñals ha admitido que la recuperación económica mundial que se está produciendo "no se palpa" en las tasas de paro y que existen importantes bolsas de pobreza en determinados países, pero ha señalado que esos estados están en una mejor situación de la que tenían en 2008.

En los momentos actuales hay "razones para pensar" que la recuperación económica está más asentada dado que hay una aportación más equilibrada al crecimiento de los países emergentes y avanzados, y ha reconocido que hubo "un fallo colectivo" al pensar, en 2008, que la crisis iba a tener un recorrido distinto al que luego se produjo.

No obstante, ha explicado, no todos los países van a salir de la crisis al mismo tiempo ni al mismo ritmo, pero ya se está "en la trayectoria de salida" y ésta dependerá "de las buenas políticas y de los políticos". Según Viñals, se ha progresado en el ámbito de la regulación financiera para dejar atrás un sistema que en los principales países estaba "sobredimensionado, opaco, complejo y especulativo", que condujo a una infravaloración general del riesgo y a una insuficiente prudencia.

Pero queda "mucho por hacer", como aplicar la nueva regulación de supervisión bancaria Basilea III, que los bancos sistémicos amplíen su capital y sean supervisados de forma intensa, la reforma "a fondo" de los mercados de derivados para evitar efectos dominó como el producido por Lehman Brothers, y la regulación del sistema de banca paralela.

Reforzar la solidez del sistema financiero para que los bancos tengan colchón de capital suficiente para poder suministrar crédito bancario es imprescindible, ha manifestado, para una recuperación duradera de la economía.