El secretario general del PSOE en Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha señalado que "mientras haya preocupación por lo que hace el PSOE, es síntoma de que realmente la gente quiere volver a confiar en nosotros". "Yo siempre he pensado que la presión que tiene el PSOE es inversamente proporcional a la decepción que tiene la gente con el Gobierno", ha apuntado el líder socialista al ser preguntado por el calendario de primarias en el PSOE.

Tras asegurar que su opinión sobre el calendario "ha sido siempre la misma", García-Page se ha mostrado convencido de que "si el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, lo estuviera haciendo bien y la gente estuviera contenta con el Gobierno del PP, verdaderamente habría poca gente que nos apretaba". "Si las cosas van bien, la gente no se preocupa de la alternativa", ha reiterado.

"La gente nos está apretando en la dirección de que nos convirtamos en la alternativa porque la gente necesita en España una alternativa", lo que hace, a su juicio, que "este momento sea bueno para reflexionar sobre el mejor calendario, no sea que se nos vaya la vez". "Hay que ir con el paso acertado, no con el paso cambiado", ha dicho García-Page, quien reconoce que esto es "opinable".

De hecho, ha recordado, la posición de hacer las primarias antes de las europeas es relativamente minoritaria dentro del PSOE. "Hay más gente que piensa que hay que hacerlas en otro momento", ha continuado el también alcalde de Toledo, quien ha abogado por llegar a un consenso sobre cuál es el mejor calendario "porque discutir por esto sería como empezar muy mal un proceso de debate interno que tiene que terminar con el mejor liderazgo posible dentro del PSOE".

"Yo personalmente no veo hablar de estos asuntos como un drama, al contrario, lo grave sería para el PSOE que a nadie le importara cuando nos juntamos para decidir el candidato", ha aseverado.

Finalmente, García-Page ha asegurado que el secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, "tiene la mejor disponibilidad para que esto vaya bien". "Hay que reconocer que estamos hablando de un momento muy difícil, donde nos está tocando hacer la digestión de un batacazo electoral y desentrañar las propias contradiciones que hubo en la última etapa del Gobierno del PSOE, a la hora de abordar una crisis que se nos echó encima", ha concluido.