Las obras del colegio público de Pinedo, según anunció el propio Ayuntamiento de Valencia, tendrían que haber comenzado hace tres años, pero los retrasos han sido continuos.

En noviembre de 2006, las familias que llevan a sus hijos al colegio vieron la luz porque las obras comenzaron, pero ayer las tuvieron que paralizar, ya que el Ayuntamiento, según les ha contado, no ha desahuciado aún a un propietario cuyos terrenos han sido expropiados.

Hasta que no se cumpla esta exigencia, las obras no se podrán reanudar. La asociación de madres y padres de alumnos no oculta su malestar: «No entendemos que quienes nos piden el voto tengan arrestos para reírse de 200 niños en la cara de sus padres, todo lo que tenemos es una enorme valla publicitaria que casi da por construido el centro, cuando realmente no es así».

La asociación, según ha informado, no descarta realizar manifestaciones y concentraciones en los próximos días para que las obras del colegio público de educación infantil se retomen cuanto antes.