El nuevo director del aeropuerto de Sevilla, Jesús Caballero, ha destacado este miércoles que San Pablo es "rentable" y superará en 2013 los cuatro millones de beneficios que obtuvo el pasado año, a pesar de la caída en el tráfico de pasajeros, que ronda el 16 por ciento.

En declaraciones en un encuentro con periodistas, Caballero ha señalado que el aeropuerto hispalense es "eficiente" en sus cuentas y lo ha conseguido a través del "esfuerzo" en reducir el gasto, una subida de tarifas y el mantenimiento en el nivel de ingresos (unos 44 millones).

Así, el director de San Pablo, que se incorporó el pasado 15 de junio en este cargo después de tres años y ocho meses en el aeropuerto de Melilla, ha apuntado que la previsión que manejan es que para el año 2015 se consiga aumentar el número de pasajeros —teniendo en cuenta que tiene potencial para llegar a los ocho millones de pasajeros— después de un 2014 de mantenimiento. Si bien, para la temporada de invierno de este año Caballero espera que siga cayendo.

Para esto, el aeropuerto ha puesto en marcha una estrategia que pasa por diversificar mercados y ha hecho hincapié en Alemania, sobre todo, en Munich y Berlín. "Ahora el 70 por ciento del tráfico del aeropuerto es mercado nacional y ahí está el principal motivo de la caída tan importante en el nivel de pasajeros", ha subrayado Caballero, quien ha señalado que se han iniciado conversaciones con una veintena de compañías aéreas para conseguir diversificar el mercado.

En este sentido, ha indicado que las conexiones con Francia e Italia son buenas, con Reino Unido también, aunque "se puede aumentar frecuencias", y se ha centrado en Alemania, donde "hay una demanda latente no cubierta", y en los países emergentes.

También ha señalado los esfuerzos por intentar captar a los pasajeros que van hacia la costa de Huelva y Cádiz que pasan por el aeropuerto de Faro, en Portugal. Además, ha detallado la creación de una sala VIP para la temporada de verano en 2014, además de la sala de autoridades con que ya cuenta el aeropuerto, así como mejorar la oferta comercial en la terminal.

También ha resaltado como ventaja del aeropuerto sevillano que el 98 por ciento de los vuelos cuenta con frecuencias regulares, contando con 44 destinos, de los que 28 son internacionales y 16 nacionales.

"bienvenidas todas las compañías"

El director del aeropuerto de San Pablo se ha mostrado abierto a recibir a todo tipo de compañías aéreas que quieran operar en estas instalaciones. "Bienvenidas todas las que quieran operar", ha resaltado para señalar que "el aeropuerto está abierto a todo tipo de compañías". En este sentido, ha detallado que el 85 por ciento de las compañías que operan en el aeropuerto son 'low cost', unos niveles que también se dan, por ejemplo, en el aeropuerto de Barcelona.

En cuanto a la posible competencia de los trenes de Alta Velocidad (AVE) con el avión, Caballero ha apuntado que sí puede darse esta relación con el destino de Madrid, pero no con Barcelona, donde "sigue siendo fuerte el aeropuerto".

Por último, respecto a la liberalización de la torre de control, ahora a cago de Ferronats, ha destacado la "solvencia técnica" de esta empresa, junto con que "las compañías no tienen queja, están contentas".

Respecto a las conexiones del aeropuerto con la ciudad de Sevilla, ha señalado este punto como "fundamental", por lo que han abierto diferentes líneas de trabajo con el Ayuntamiento hispalense, entre las que ha apuntado la mejora de las frecuencias en los autobuses. No obstante, ha destacado que a largo plazo la solución pasa por la conexión vía tren.

Sustituye a eugenio pérez

El granadino Jesús Caballero es desde el 15 de junio el nuevo director del aeropuerto de San Pablo de Sevilla, en sustitución de Eugenio Pérez Luengo, que deja el aeropuerto al haber sido nombrado gerente de Proyectos Internacionales de AENA.

Nació en Granada, es ingeniero superior aeronáutico, máster en Dirección y Administración de Empresas (MBA) por la Cámara de Comercio de Málaga y ha realizado el Programa de Desarrollo Directivo del IESE.

Se incorporó en AENA en junio de 2008, en el aeropuerto de Málaga-Costa del Sol, en la división de Servicios Aeroportuarios, como técnico de servicios. Ha sido director del aeropuerto de Melilla desde noviembre de 2009.