«Las rebajas empezaron muy bien la primera semana, y el sábado fue un bombazo, pero la segunda se ha frenado. En parte, debido a que no ha llegado el frío», explica Jon Aldeiturriaga, gerente de la Asociación de Comerciantes del Casco Viejo, que, al igual que todos sus compañeros, confía en «que venga ya el mal tiempo».

Sin embargo, no todo son malas noticias y la conocida como ropa de entretiempo se está vendiendo a buen ritmo durante el periodo de descuentos. «No sé si las rebajas valdrán para salvar la temporada, que está siendo muy mala, pero tiene buena pinta», indica Jon Andoni Zarate, gerente de la asociación Bilbao Centro.

La moda es uno de los factores que están influyendo a la hora de que este tipo de prendas se vendan; «hay empresarios que se mueven mucho buscando las nuevas tendencias, lo que se llama moda pronta, para ofrecer lo último a las fashion victims», señala Aldeiturriaga.

Las botas sí suben

Sorprendente es, por el contrario, la escasa crisis que está sufriendo el sector del calzado debido, precisamente, a la última moda. Por ejemplo, las botas de invierno no han dejado de venderse. «Es muy habitual ver, con el calor que está haciendo, a muchas jóvenes calzando botas incluso de après ski (después del esquí), porque es lo que se lleva ahora», dicen los comerciantes.

¿Va de rebajas?

Ana Villada: Limpiadora, 40 años.

«Siempre espero a que lleguen las rebajas para ir a comprar. Ya antes de que lleguen, me quedo con los precios de lo que necesito y luego comparo, para ver si realmente lo han bajado».

Iñaki López de Letona: Ingeniero, 25 años.

«No suelo ir de rebajas porque soy de los que voy comprando cuando lo necesito. Además, creo que está montado de tal forma que la gente compra más de lo que realmente necesita».

Maite Egaña: Ama de casa, 82 años.

«No voy mucho, pero mi hija y mi nieta sí y ellas tienen un truco para no comprar de más: miran el precio de lo que necesitan, esperan a las segundas rebajas, y si sigue ahí lo que quieren, hasta las terceras».