Por la Murcia interior, en la ruta del Chato Murciano

El Chato Murciano es un cerdo autóctono, hasta hace poco una raza en peligro de extinción, que encontramos en la Murcia interior. Sus ejemplares poseen una carne de sabor similar a la del cerdo ibérico.

En la actualidad, casi una veintena de granjas repartidas por la Región de Murcia trabajan con el objetivo de preservar esta raza, legítima heredera de la cultura campesina local. Recorremos algunas de las poblaciones vinculadas al Chato Murciano.

Bullas

Puntos de interés son la iglesia del Rosario, de finales del siglo XVII; la Casa de la Cultura, un hermoso palacete de estilo modernista; y la Casa-Museo de Don Pepe Marsilla, donde se recrea el modo de vida de las clases pudientes a principios del siglo XX. Del antiguo castillo se conservan restos en la calle Peseta. En su entorno natural, el barranco de la Regidora –uno de los parajes con más encanto de la región–, el valle del Aceniche y el cauce del río Mula, con varios saltos de agua.

Cehegín

En su parte más vieja, descubrimos el palacio de Jaspe, hoy sede del Ayuntamiento; el Hospital de la Real Piedad, el Casino y la Casa del Duque de Ahumada. La plaza del Castillo la flanquean la iglesia de Santa María Magdalena y los restos de las murallas almohades del siglo XII.

Encontramos aquí yacimientos con muestras de culturas prehistóricas de hace 4.500 años. En el enclave de Begastri, los arqueólogos han hallado restos íberos, romanos y visigodos. En el noreste, entre los ríos Argos y Quípar, el Parque Natural San Agustín. e trata de 110 hectáreas de bosque mediterráneo con pinares, ejemplares de carrasca y sotobosque.n el enclave de Begastri, los arqueólogos han hallado restos íberos, romanos y visigodos. En el noreste, entre los ríos Argos y Quípar, el Parque Natural San Agustín. e trata de 110 hectáreas de bosque mediterráneo con pinares, ejemplares de carrasca y sotobosque.

Caravaca de la Cruz

Es una de las cinco ciudades santas del catolicismo, organizada toda ella en torno a la basílica-santuario de la Santísima y Vera Cruz. Allí se veneran dos astillas de lignum crucis donde habría sido crucificado Jesucristo. De la arquitectura civil de la localidad destacan los restos del recinto amurallado y un edificio barroco llamado Templete o Bañadero.

Moratalla

Su castillo es un ejemplo perfecto de la arquitectura medieval defensiva. Levantado en el siglo IX, tuvo su papel en la defensa del Al-Andalus. Destaca la torre del Homenaje, del siglo XV, construida por los Caballeros de la Orden de Santiago. Llamativas también la  portada barroca del convento de San Francisco y la ermita de Santa Ana.

Fuente: Guía Repsol. Rutas, mapas, restaurantes … ¡Planifica con nosotros tu viaje!