El fiscal Carlos Bautista ha mantenido el delito de colaboración con ETA, como alternativo al de revelación de secretos, para el ex jefe superior de Policía del País Vasco Enrique Pamiés y el exinspector de Álava José María Ballesteros por el chivatazo dado a la banda en 2006 en el bar Faisán de Irún.

En el último día del juicio que se celebra desde el pasado lunes en la Audiencia Nacional, el fiscal ha confirmado su petición de 2 años de cárcel para Pamies y 1,5 para Ballesteros por revelación de secretos y, alternativamente, 5 años por colaboración con banda armada por el soplo que supuestamente dieron al dueño del bar Faisán y presunto etarra, Joseba Elosua, el 4 de mayo de 2006.

Por su parte, el fiscal Carlos Bautista no ha descartado que detrás del chivatazo a ETA en 2006 haya "otras personas", por lo que ha esperado que, si se les condena, ocurra como con el excomisario José Amedo en los GAL y "algún coimputado" hable.

La Fiscalía también reclama la inhabilitación absoluta para ambos mandos policiales por un periodo de 11 años y una multa. Las acusaciones del caso han elevado asimismo a definitivas sus escritos y no han modificado, por tanto, las penas pedidas inicialmente. El PP ha mantenido su petición de 8 años y medio de cárcel para Pamiés y 7 años y medio para Ballesteros, así como 20 años de inhabilitación absoluta para ambos; Dignidad y Justicia de 10 y 9 años de cárcel y 18 y 17 años de inhabilitación absoluta, y la Asociación de Víctimas del Terrorismo de 8 años y medio y 8 años de cárcel y 5 y 4 años de inhabilitación para ser miembro de las fuerzas de seguridad del Estado.

A diferencia de la Fiscalía, que plantea penas alternativas si son condenados por uno u otro delito, las acusaciones consideran que se les debe imponer una pena única por los dos delitos en concurso. Las defensas de los policías han reclamado su libre absolución. La cuarta jornada del juicio del caso Faisán ha arrancado con la audición de la conversación pinchada por la Policía de Elosua con su yerno, en la que le relata la llamada del chivatazo que tiró por tierra una operación contra el aparato de extorsión de la banda en 2006.

Por otra parte, en esta cuarta jornada del juicio se ha escuchado la audición de la conversación pinchada por la Policía entre Elosua con su yerno, en la que le relata la llamada del chivatazo. El jucio, además, ha sido suspendido hasta el próximo lunes, cuando se reanudarán las sesiones, y cuando se seguirá con los informes de conclusiones definitivas de las acusaciones y defensas.