Los sindicatos del naval de la ría de Vigo han pedido que se cierre "definitivamente" el expediente abierto por la UE con respecto a las bonificaciones fiscales del tax lease, ahora que ya se conoce la cuantía que los inversores tendrán que devolver (un máxima de 126 millones), porque, de lo contrario, las posibilidades de cerrar nuevos contratos serán "nulas".

Así lo ha manifestado el responsable del naval de CC.OO., Ramón Sarmiento, quien ha recordado que el reconocimiento de la cuantía por parte del Ministerio de Hacienda es el "penúltimo capítulo" en el expediente del antiguo tax lease, pero que ahora falta la verificación de Bruselas. "Eso es algo que nos preocupa más, porque las autoridades europeas no han sido muy diligentes con el sector naval español", ha apuntado.

Por su parte, el portavoz de UGT, Diego Atanes, ha recordado que, aunque la devolución sea menor de la esperada, sigue habiendo problemas para que el sector pueda contratar aplicando el nuevo tax lease, pendiente de "modificaciones legislativas".

Atanes ha expresado su esperanza de que haya un acuerdo pronto con los inversores para ejecutar las devoluciones y para que el sector pueda abrir un nuevo escenario. En ese sentido, ha reclamado más implicación de la administración, así como de Pymar y de los propios empresarios, para que se reactiven instrumentos como las mesas sectoriales o el fondo de garantías.

No recurrir

Por su parte, el portavoz de la CIG, César Rodríguez, ha instado a los agentes implicados a, una vez conocida el montante de las ayudas a recuperar, "cerrar de una vez por todas el expediente del tax lease" para "empezar a trabajar" con el nuevo sistema que, hasta ahora, "no ha funcionado".

En ese sentido, el representante del sindicato nacionalista ha mostrado su rechazo a la decisión del gobierno central de recurrir ante la UE el expediente y las devoluciones. "No tiene sentido, lo que no se hizo en dos años, no se va a hacer ahora en dos meses", ha indicado, y ha añadido que "hay que asegurar las vías reales".

Así, Rodríguez ha pedido a Pymar que recupere su papel como avalista de operaciones, al tiempo que ha recordado la situación crítica del sector, con astilleros sin carga de trabajo, regulaciones laborales, y una industria auxiliar prácticamente desaparecida.