Centenares de inmigrantes consiguieron entrar este martes en Melilla en un salto a la valla fronteriza en el que han participado casi de 300 ciudadanos de origen subsahariano, de acuerdo a la información facilitada por la Delegación del Gobierno. Según fuentes policiales, el salto se produjo sobre las 6.30 horas en la zona cercana al puesto fronterizo de Barrio Chino y al aeropuerto.

Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado intentaron impedir la entrada con la ayuda de un helicóptero, aunque se calcula que el número de personas que consiguió entrar a la ciudad puede rondar las 100. Según la Delegación del Gobierno, seis guardias Civiles han resultado heridos, mientras que uno de los inmigrantes ha tenido que ser trasladado al Hospital Comarcal por una fractura en una pierna.

Se trata del primer salto a la valla registrado en las últimas semanas, ya que se habían vivido unas jornadas de relativa tranquilidad en el perímetro, aunque con avistamientos de grupos constantes. La entrada de inmigrantes coincide con el Día de Melilla, una fecha que celebra el 516 aniversario de la españolidad de la ciudad.

Otros 90 inmigrantes lograron acceder a la ciudad autónoma de Ceuta tras entrar a nado en grupo en la playa del Tarajal, situada junto a la frontera marroquí.

Los inmigrantes consiguieron superar los controles fronterizos al llegar en un grupo que, según los cálculos de la Guardia Civil, podría superar el centenar de personas. El resto han sido frenados por las fuerzas de seguridad marroquíes que custodian la frontera. A la espera del recuento final, los inmigrantes fueron atendidos en la misma playa por la Cruz Roja Española.

La última llegada a las playas de Ceuta ocurrió el 2 de septiembre, cuando más de 80 inmigrantes recurrieron a la entrada en grupo. Consiguieron entrar 33 personas. Esta situación ha producido que el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) donde son atendidos esté desbordado, ya que tiene censadas a más de 700 personas pese a que solo tiene espacio para 500.

La situación es similar en el CETI de Melilla. Con unas 850 personas, está casi al doble de su capacidad inicial, que es de 480, lo que ha obligado a instalar tiendas de campaña y literas cedidas por el Ejército.

El número de intentonas de entrada en territorio español ha repuntado este verano. Las autoridades españolas y marroquíes han admitido la muerte de, al menos, dos personas en el perímetro fronterizo. En Ceuta, al medio centenar de inmigrantes llegados de este martes, se suman los 30 de este lunes. Otras doce personas habrían caído al agua y una de ellas apareció muerta.

Los desaparecidos en aguas del Estrecho a lo largo de este año se cuentan por decenas. La llegada de pateras a las costas andaluzas ha sido constante, con un notable incremento a lo largo del verano.