La Dirección de Trefilería Moreda y el Comité de Empresa han alcanzado un preacuerdo que contempla la reducción del salario en aproximadamente un seis por ciento y el aumento de la jornada laboral al objeto de garantizar la actividad de la planta gijonesa y evitar la deslocalización de la producción. Será la asamblea de trabajadores la semana próxima, previsiblemente el martes, quien ratifique o no este preacuerdo, del que quedan aún algunos puntos de concretar.

Este está ligado asimismo a un plan de viabilidad hasta 2016 que permite el descuelgue del convenio colectivo en determinados conceptos económicos, pero incluye la contratación de 50 eventuales y el hacer indefinidos a 20 trabajadores. Además, pasaría a Gijón una máquina procedente de otra planta del Grupo Celsa, al que pertenece la fábrica, para poder aumentar la producción, ha señalado a Europa Press el secretario general de MCA-UGT en Gijón, Javier Fernández Lanero.

También establece una garantía para que en caso de que el plan de viabilidad no fuera efectivo los trabajadores recuperaran los salarios perdidos y se contemplaran estos en el cálculo de las indemnizaciones por despido. Además, en 2017 se revalorizarían las tablas salariales para recuperar lo perdido.

Fernández Lanero ha justificado este preacuerdo ante el riesgo de deslocalización de la producción anunciado por el grupo empresarial, que traería consecuencias para la plantilla, que suele oscilar entre 200 y 250 personas.

Ha explicado que es una empresa que se dedica a producir y exportar y que suele tener balances positivos, no así en otras plantas del Grupo Celsa que tienen "endeudamientos importantes". Esto último, de hecho, motivó que en 2012 se pusiera en marcha en todo el Grupo un plan de ajuste y reestructuración, cuyo grado de afectación varió en función de la cuenta de resultados de cada planta. No obstante, en la actualidad no había activado en Trefilerías Moreda ningún ERE.