El educador sociocultural Jorge Morillo, famoso en Sevilla a cuenta de su intensa labor en favor de las familias desfavorecidas de los núcleos chabolistas y su inconfundible atuendo bético, ha anunciado este jueves el "cierre" literal del grueso de su programa alternativo de lucha contra la exclusión social. Morillo atribuye esta decisión a la cruda situación que él mismo atraviesa al carecer de empleo y recursos, así como a la "falta de apoyo" de las administraciones y el "vacío" que sufre su relación con el Real Betis Balompie, cuyos colores luce a todas horas.

Poco antes de comenzar el verano, como se recordará, Jorge Morillo anunciaba que su programa social, titulado 'Educar en la Calle' y con 28 años de historia, corría riesgo de desaparecer si no contaba con apoyo financiero para el mismo. Morillo explicaba entonces que el programa, consistente en actividades deportivas y excursiones para los niños de los asentamientos chabolistas, había gozado durante los dos años anteriores de financiación por parte de la Fundación Real Betis, si bien dudaba de la continuidad de dicho respaldo económico.

No obstante, y tras una reunión celebrada con los representantes de la Fundación Real Betis, Morillo anunciaba que dicha institución se había comprometido a aportar 8.000 euros con destino a una nueva edición de este programa social. Pero este jueves, Jorge Morillo ha anunciado que su programa de educación contra la exclusión social dejará de funcionar para los niños de las zonas chabolistas y desfavorecidas de El Vacie, Torreblanca, Cerro Blanco, San Juan de Aznalfarache y los bajos de los puentes que conectan dicho municipio aljarafeño con Sevilla. El programa sólo seguirá vivo en el caso de los menores de las Tres Mil Viviendas, en el Polígono Sur.

Y es que, según Morillo, pese al respaldo financiero cosechado a manos de la Fundación Real Betis, su situación personal es ya muy delicada y le impide dedicarse plenamente a esta iniciativa altruista. "Ya no percibo ni la ayuda de los 426 euros. Estoy pidiendo dinero prestado y tengo que acudir a la caridad", ha lamentado Jorge Morillo sobre sus propias circunstancias personales, agravadas a cuenta de la crisis económicas como en el caso de muchas otras personas.

Morillo ha explicado que renuncia a la ayuda de 8.000 euros comprometida por la Fundación Real Betis, explicando además que al margen de lo económico, siente un "vacío muy grande en cuanto al apoyo moral" que considera debería ofrecerle el club verdiblanco al lucir siempre sus colores. "No tenemos unas relaciones claras", ha señalado en cuanto al Real Betis Balompie. Igualmente, ha lamentado no contar con "apoyo suficiente" por parte de las administraciones para seguir adelante con sus actividades.

"El Ayuntamiento, por ejemplo, no quiere saber nada de mi. Es el precio de la independencia, supongo", ha lamentado reconociendo que siente "pena" al adoptar esta decisión pero que necesita reflotar su propia vida a cuenta de la difícil situación que atraviesa.