Monfragüe, el verde oasis que sorprende en Extremadura

  • Ocupa 17.852 hectáreas y representa uno de los enclaves más extensos y representativos de bosque y matorral mediterráneo.
  • Es el último refugio del buitre negro, una especie en grave peligro de extinción.
  • Vistas espectaculares desde el cerro Gimio y el castillo de Monfragüe.
Monfrague
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Monfrague

Estamos en la provincia de Cáceres, lugar donde la naturaleza nos dará sorpresas continuas. Así, el Parque Natural de Monfragüe, uno de los catorce existentes en España, es un enorme edén al abrigo del cauce del río Tajo. Monfragüe –del latín Monsfragorum, bosque fragoso– fue declarado Parque Natural en 1979 y Parque Nacional en el 2007.

Monfragüe ocupa una superficie de 17.852 hectáreas y representa uno de los enclaves más extensos y representativos de bosque y matorral mediterráneo mejor conservado, a pesar de que por sus tierras han pasado diferentes culturas. Flanqueado por las localidades de Navalmoral de la Mata, Plasencia y Trujillo, el bosque se yergue como prototipo de bosque y matorral mediterráneo.

Este inmenso bosque es el último refugio del buitre negro, una especie en grave peligro de extinción. Las 286 parejas que habitan en el parque representan la mayor comunidad de estas aves existente en todo el mundo. En el eje central montañoso se localizan la mayoría de los nidos de las rapaces.

Para preservar intacto el hábitat de flora y fauna, el parque tiene restringido el acceso a las zonas más sensibles. Para compatibilizar conservación y disfrute público, se han diseñado itinerarios que permiten al visitante contemplar el frondoso esplendor del parque.

El castillo de Monfragüe es la silueta dominante del parque desde su elevado promontorio. Una decena de kilómetros separa al visitante de la fortificación. Una excursión digna de cantimplora y bocadillo. Ya arriba el visitante podrá disfrutar de las impactantes vistas que desde su elevación ofrece. Está permitido el acceso a una de sus torres, que datan del siglo XV.

Vistas espectaculares también son las que hallamos en el cerro Gimio. Para llegar, una ruta de siete kilómetros. El itinerario comienza en Villarreal de San Carlos. Por un camino de eucaliptos se llega al arroyo de Malvecino y siguiendo su curso al encantador puente homónimo de madera y mampostería que lo cruza. Aquí comienza la ascensión por la ladera hasta el monte Collado, a su vez antesala del cerro Gimio. Primero el mirador del Collado y luego el cerro desde donde se domina el paisaje.

Otro de los tesoros de Monfragüe son las más de 70 representaciones de arte rupestre que se hallan en numerosos "abrigos" que ofrece la montaña. En vivos colores rojos aparecen representadas figuras antropomórficas, ídolos y animales. En todos los casos, las pinturas aparecen en lugares estratégicos de la orografía, puntos elevados que hacían las veces de atalayas.

Fuente: Guía Repsol. Rutas, mapas, restaurantes … ¡Planifica con nosotros tu viaje!

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