La Diputación Permanente celebrada este martes ha rechazado la convocatoria de un pleno extraordinario del Parlament para abordar la situación existente en educación, especialmente a raíz de los expedientes disciplinarios abiertos a tres directores de institutos de Menorca por la aplicación del Decreto de Tratamiento Integrado de Lenguas (TIL).

De esta manera, los votos del PP han impedido que la Cámara balear acoja una sesión extraordinaria para abordar la situación de la educación balear al entender que se trata de una "técnica" de los grupos de la oposición para "intentar confundir a la opinión pública", que forma parte de su maniobra de "desgaste" al Govern de José Ramón Bauzá.

Así se ha manifestado durante la Diputación Permanente la parlamentaria del PP Aina Maria Aguiló, quien también ha señalado que los expedientes son "actos administrativos", ha manifestado después de que tanto la socialista Cristina Rita como el portavoz de MÉS, Biel Barceló, asegurasen que esta decisión ha sido "política".

Además, Aguiló ha criticado que estos tres directores de institutos se "hayan negado por una opinión personal a aplicar un decreto legítimo" y ha considerado que el Parlament no debe verse "paralizado por tres directores". La diputada ha dicho que si los diferentes decretos se viesen paralizados por las opiniones de funcionarios esto "nos conduciría al caos".

Mientras, Barceló ha apuntado que el objetivo del Ejecutivo balear con el TIL no es que los alumnos aprendan una tercera lengua, sino que se reduzca la presencia de la lengua propia en las aulas. "Así no se aprenderá inglés, es falso que al Govern le preocupe el inglés, quieren hacer recular la lengua propia" porque, según ha dicho, el Govern está molesto con el hecho de que más del 80 por ciento de los padres escogiera la enseñanza en catalán para sus hijos.

El portavoz de MÉS ha indicado que el TIL es una "normativa hecha sin consenso y diálogo" en la que el Govern "ha actuado con autoritarismo" y ha llevado a cabo "cambios sustanciales sin contar con la opinión de la comunidad educativa". Según Barceló, los tres directores expedientados no demostraron ninguna "rebeldía" en sus actuaciones.

Por su lado, la socialista Cristina Rita, quien ha incidido en el apoyo de su grupo a los directores expedientados, ha considerado que esta cuestión "necesita explicaciones y ser debatida en el Parlament". Han sido, según ha dicho, "decisiones arbitrarias que crean alarma en la comunidad educativa y el alumnado sufrirá las consecuencias".