El Comisario de Justicia, Libertad y Seguridad de la Unión Europea , Franco Frattini, parece estar dispuesto a establecer una regulación común para restringir la venta de videojuegos no recomendados para menores de 16 años.

Pretende así castigar a los comerciantes que, según él, venden estos productos "ilegalmente", a los que no verifican la identidad de los compradores.

Se trata de que a la hora de adquirir un juego catalogado para mayores de 16 años el comerciante pida la correspondiente identificación a la persona, comprobando así que es mayor de edad.

El Comisario ya ha hecho una propuesta a los ministros de Justicia para unificar las sanciones que se deben aplicar a los que no cumplan este tipo de medidas.

Alemania, Reino Unido, Grecia, italia, Hungría, Finlandia, Francia y España son países que ya le han expresado su apoyo y que pretenden establecer una "línea dura" contra los videojuegos violentos.