La vicesecretaria de Territorio, Medio Ambiente y Asuntos Europeos del PP-A, Alicia Martínez, ha afirmado que el presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, "no puede ir haciéndose el mártir, al ser probablemente el presidente que más daño a hecho a la Comunidad y al formar parte de quienes han ensuciado su nombre". Además, ha asegurado que el nombramiento de la consejera de la Presidencia, Susana Díaz, estaba "todo pactado" con IU, con quien será "generosa" en la atribución de "concesiones" por su apoyo.

En rueda de prensa, Martínez ha advertido de que se trata de la segunda vez que un presidente andaluz "abandona" la Comunidad "buscando refugio en Madrid para alejarse de los focos". Así, señala que desde este martes habrá un "gobierno oficialmente en funciones, ya que realmente lleva un año así" y advierte del "daño causado" por Griñán a Andalucía, a la que ha "salpicado con los casos de corrupción".

Además, insiste en que los funcionarios de la Administración regional se han visto igualmente "salpicados" por estos casos, mientras que el gobierno andaluz ha puesto de forma "continua trabas a la Justicia, negando actas, retrasando la entrega de documentación y coartando el trabajo del juez. También, afirma que se ha hecho "mucho daño" a la región dejando que "todo siga igual, a pesar de que Andalucía no levanta cabeza, con una tasa de paro por encima de la media nacional".

"PSOE e IU firmaron un pacto de silencio en el que el único objetivo era tapar la corrupción, mientras que la hoja de ruta actual estaba pactada de antemano", recalca, tras insistir en la "parálisis" que asegura que experimenta desde hace un año la Junta de Andalucía, "centrada en una estrategia de confrontación contra el Gobierno de Mariano Rajoy". Martínez afirma que se trata de un gobierno "sin rumbo" que ha pasado de "dar ordenadores a dar bocadillos en los colegios".

"el gobierno no se traspasa"

En este marco, ha recalcado que el gobierno andaluz "no se traspasa" y que la actual consejera de la Presidencia, Susana Díaz, será "generosa con las exigencias" de IU porque "quiere ser presidenta por encima de todo", unas exigencias que asegura que pasarán por un incremento de las "concesiones" a la federación de izquierdas, que pedirá "quizás un sillón más y el mantenimiento de su estructura". Sin embargo, Martínez exige que "no se repartan las carteras como hizo Griñán, que dejó compartimentos estancos".

"Todo esto es más que suficiente para exigir que se convoquen elecciones y que Díaz se someta a la voluntad de Andalucía, algo a lo que se niega, mientras que el PP seguirá trabajando y planteando iniciativas, aunque se sabe que con ese nuevo gobierno habrá más de lo mismo", señala Martínez, que pide un "cambio de actitud" para que "en vez de pelear y recurrir, que se cumpla con los presupuestos".

"renuncia a los despachos" y al victimismo"

Desde el PP-A se pedirá a la nueva presidenta que establezca un calendario de pago a proveedores "exhaustivo", un programa de empleo, servicios sociales "de calidad", además de una sanidad "pública y gratuita".

Así, insta también a que se renuncie al "despilfarro, a los despachos y a la moqueta en San Telmo", asumiendo un compromiso con todos los andaluces "por encima de las siglas y de los partidos y abandonar el victimismo con el que tanto daño han hecho a Andalucía".