Agentes de la Patrulla de Protección del Medio Ambiente y Bienestar Animal de la Policía Local de Castellón (Uproma) han instruido diligencias al juzgado de instrucción de guardia contra un hombre por una presunta falta penal ocasionada por dejar libre —sin correa ni bozal— y mantener "fuera de control" a uno de sus perros que supuestamente causó lesiones a dos personas y sus respectivas mascotas.

Según han informado la Policía Local de Castellón en un comunicado, el pasado 13 de febrero, un vecino de la calle San Alfonso ubicada en el Grupo Perpetuo Socorro de Castellón, solicitó la presencia de los agentes de Policía Local para denunciar la agresión de un perro que le había causado lesiones a él y a su mascota.

Así, los agentes se presentaron en el lugar comprobaron que se había producido el ataque de un perro contra un hombre y su can. Los policías le preguntaron a la presunta víctima si conocía al perro causante de las lesiones y afirmó que conocía "tanto al animal como a su dueño, el cual, siempre paseaba el perro sin correa y sin bozal, que suponía por tanto, un peligro para el resto de personas y animales que en ese momento se encontraban en la vía pública".

Posteriormente, los agentes se entrevistaron con el dueño del perro agresor, que se negó a dar explicaciones sobre la supuesta agresión aduciendo que su perro, —un cruce de pitbull y mastín— "no había sido el causante de ninguna lesión". Ante todos los hechos y declaraciones recogidas, los agentes redactaron varios boletines de denuncia por infracciones a la Ordenanza municipal de Animales de Compañía "por no tener censado al perro y llevarlo suelto y sin bozal".

Durante los meses posteriores, los agentes de la Uproma realizaron varios seguimientos al propietario del perro agresor intentando entrevistarse con él para conocer si el perro había sido censado, vacunado y si el dueño continuaba paseando al perro por la calle sin bozal y sin correa. Todos los intentos de los agentes de esta unidad para contactar con esta persona fueron "infructuosos" hasta que se produjo la segunda agresión del perro que "también queda reflejada en las diligencias judiciales".

Segundo ataque

El presunto segundo ataque de este perro se produjo el 11 de julio cuando el can causó lesiones a una vecina, por una mordedura en una mano, y a su mascota. Los agentes se presentaron en el lugar de los hechos y pudieron constatar que de nuevo "había sido el perro agresor de la anterior ocasión el que había causado las lesiones", por lo que el animal fue decomisado por la empresa municipal de recogida de animales al comprobar los agentes que el can continuaba "sin estar censado y sin tener puesta ningún tipo de vacuna".

Así, este supuesto ataque se puso también en conocimiento de la Unidad de Protección del Medio Ambiente y Bienestar Animal, cuyos agentes después de examinar las dos agresiones y hacer un seguimiento de los hechos, han puesto en conocimiento del Juzgado el caso por si el propietario del animal estuviese incurriendo en una falta penal contemplada en el artículo 631 del Código Penal consistente en dejar libres animales feroces o dañinos que han causado lesiones a personas y animales.