La Dirección General de Tráfico (DGT) iniciará este lunes una campaña de control de velocidad que incidirá mayoritariamente en las carreteras convencionales y también en las vías urbanas de Galicia, con la participación de los ayuntamientos.

Según informa la Delegación del Gobierno en Galicia, el objetivo de llevar a cabo estos controles es "reducir la velocidad media en estas vías, disminuir los niveles alcanzados de grandes excesos de velocidad, y concienciar a los conductores de la estrecha relación entre una velocidad inadecuada y los accidentes en el ámbito urbano e interurbano", que derivan fundamentalmente en el atropello de peatones o viandantes.

La campaña se desarrollará durante toda la semana —hasta el domingo 25— y estará coordinada por los jefes provinciales y los jefes de los subsectores de las cuatro provincias, quienes confeccionaron conjuntamente los recorridos a desarrollar para que el número de vehículos controlados sea mayor que el de campañas de años anteriores, así como por el Centro de Gestión del Tráfico del Noroeste. Para la realización de la campaña se utilizará el máximo número de medios humanos y materiales disponibles.

La Dirección General de Tráfico recuerda que esta campaña "no supondrá una disminución de la vigilancia en otros lugares". Así, en unos casos se formularán denuncias sin notificación inmediata y en otros se procederá a la identificación del conductor y a la notificación in situ, que potencia el efecto pedagógico con la concatenación inmediata infracción-denuncia, en relación especialmente con el permiso por puntos.

Asimismo, siempre que sea posible, Tráfico indica que tanto los paneles de señalización variable como las pantallas alfanuméricas de los vehículos de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil que se encuentren en las inmediaciones, advertirán a los conductores de la existencia próxima de controles.

Calidad de vida

"La incidencia negativa que tiene la velocidad inadecuada, no solo ocasionando gran número de accidentes mortales sino sobre el medio ambiente, la calidad de vida y el consumo de combustible, hace necesario seguir incrementando los esfuerzos en el control y la vigilancia de la misma", recuerda la DGT. "Se trata de conseguir que la velocidad excesiva o inadecuada sea considerada socialmente incompatible con la seguridad vial a semejanza del alcohol o la falta de uso del cinturón o del casco", añade.

En zonas urbanas, la velocidad "es igualmente determinante por cuanto aumenta considerablemente el riesgo de muerte de un peatón tras ser atropellado, de ahí la importancia de la observancia de los límites y, consecuentemente, la vital participación de los ayuntamientos en la presente campaña", resalta la DGT.

Pese a haber incrementado entre los años 2000 y 2012 el número de vehículos controlados por la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil en más de un 100%, el objetivo de la DGT es conseguir "una mayor reducción de la velocidad media que la lograda hasta ahora" y disminuir los niveles alcanzados "de grandes excesos de velocidad", teniendo en cuenta que un 5% de descenso supondría una disminución del 20% de los accidentes mortales que se producen.