Helicópteros de la base asturiana de Ibias, y de la ourensana del Xurés, además de avionetas de carga en tierra de Doade (Lugo) y Antela (Ourense), y varias brigadas de tierra, trabajan en los montes de Verín y Vilardevós para extinguir el fuego iniciado el sábado en dos puntos de Queirugás, en el municipio de Verín, en circunstancias que hacen que los alcaldes de ambos municipios apunten que fue provocado.

Desde el inicio del fuego trabajaron en la extinción medios aéreos procedentes de Asturias, León, Salamanca y de toda Galicia y durante la noche, las brigadas correspondientes a los helicópteros de Asturias y León permanecieron en los montes afectados por el fuego para complementar el trabajo de las demás brigadas de tierra, ya que los medios aéreos se retiran con el ocaso, según explicaron fuentes del servicio de extinción.

Los municipios afectados contaron, además, con el trabajo de sus brigadas conveniadas con la Xunta de Galicia, dos en Verín y dos en Vilardevós, de cinco personas cada una, según confirmaron a Europa Press los regidores locales.

Antes de la medianoche, tres palas bulldozer perimetraron la zona afectada por el fuego, abriendo una pista que hizo la función de cortafuegos para impedir el avance de las llamas, aunque en el interior de esa área acotada continúa el fuego en montes de Bemposta poblados por un pinos de 20 años, según explicó a Europa Press el regidor de Vilardevós, Manuel Cardoso.

Cruzó carreteras

Cardoso relató que la llegada del fuego fue como "un cañón", pues pasó de una orilla a otra de la carretera N-525, luego se expandió a ambos lados de la autovía A-52 por la zona vegetal de un puente que pasa por debajo de ella, y finalmente entró en los montes de Vilardevós, muy cerca de la población de Bemposta, donde avanzó cerca de un kilómetro, según ha precisado el alcalde.

Ambas vías, carretera y autovía, permanecieron cortadas unas dos horas en la tarde del sábado, según indicaron fuentes de la Guardia Civil, y en algún momento ambas permanecieron cortadas al tráfico al mismo tiempo.

Además, Cardoso resaltó que no hay problema para los vecinos ni sus propiedades, salvo los montes particulares, algunos de ellos afectados ya por otro fuego originado hace siete años.

Fuentes del servicio de extinción indicaron que tras llegar al entorno de Bemposta, un cambio en la dirección del viento propició el control de las llamas para evitar que siguiesen hacia el pueblo de Veiga das Meás.