El Ayuntamiento de Teruel ha emprendido una campaña informativa para difundir la normativa legal sobre tenencia de animales potencialmente peligrosos ante el aumento de las denuncias de particulares y de los cuerpos de seguridad.

La Ley 50/1999 sobre el Régimen Jurídico de la Tenencia de animales Potencialmente Peligrosos establece, en su artículo 3, que "la tenencia de cualesquiera animales clasificados como potencialmente peligrosos al amparo de esta Ley requerirá la previa obtención de una licencia administrativa, que será otorgada por el Ayuntamiento del municipio".

Los requisitos para la solicitud o renovación de la licencia de tenencia de animales potencialmente peligrosos al Ayuntamiento de Teruel son ser mayor de edad, presentar un certificado negativo de antecedentes penales y una declaración jurada de no haber sido sancionado por infracciones graves o muy graves con alguna de las sanciones accesorias de las previstas en el apartado 3 del artículo 13 de la Ley 50/1999, de 23 de diciembre, sobre le régimen jurídico de animales potencialmente peligrosos.

Además, se deberá aportar un seguro de responsabilidad civil por daños a terceros con una cobertura no inferior a 120.000 euros y disponer de capacidad física y aptitud psicológica para la tenencia de animales potencialmente peligrosos.

Tipos de infracción

Por otro lado, se establecen las sanciones en caso de que no se cumplan los requisitos establecidos. En el caso de que la infracción sea muy grave, el sancionado deberá abonar una cuantía de entre 2.0404,05 euros y 15.025,30 euros.

Dentro de este tipo de infracciones se enmarcan el abandono de una animal potencialmente peligroso, no tener licencia para tener este tipo de animales, vender los animales sin licencia, adiestrar animales por quien carezca de capacitación y para activar su agresividad o para finalidades prohibidas y la organización o celebración de concursos, ejercicios, exhibiciones o espectáculos de animales potencialmente peligrosos, o su participación en ellos, destinados a demostrar la agresividad de los animales.

Las infracciones graves, con una multa de entre 300,05 euros y 2.404,05 euros, corresponden a actividades como dejar suelto un animal potencialmente peligros o no haber adoptado las medidas necesarias para evitar su escapada o extravío, incumplir la obligación de identificar al animal, omitir la inscripción en el Registro, hallarse el perro potencialmente peligroso en lugares públicos sin bozal o no sujeto con cadena y el transporte de animales potencialmente peligros con vulneración del artículo 10 de la Ley.

Estas infracciones podrán llevar aparejadas la confiscación, decomiso, esterilización o sacrificio de los animales potencialmente peligrosos, la clausura del establecimiento y la suspensión temporal o definitiva de la licencia para tenencia de animales potencialmente peligrosos o del certificado de capacitación de adiestrador.