EL IAM presta atención psicológica a 147 hijos de víctimas de violencia de género en el primer semestre de 2013

El objetivo del servicio es mejorar la situación psicosocial de los menores para prevenir la reproducción de conductas

El Servicio de Atención Psicológica a Hijos e Hijas de mujeres víctimas de Violencia de Género del Instituto Andaluz de la Mujer (IAM) en Málaga ha atendido durante el primer semestre de este año a un total de 147 menores, lo que supone un 41,35 por ciento del total de todo el año pasado, ya que en 2012 fueron atendidos 104 menores.

El programa tiene como objetivo mejorar el bienestar psicosocial de los menores y atender las necesidades socieducativas que puedan presentar. Está destinado a hijos e hijas, de entre seis y 17 años, de mujeres víctimas de violencia de género, y que también son víctimas.

En concreto el programa pretende aumentar la autoestima, resolver conflictos psicológicos derivados de su situación, potenciar actitudes y comportamientos empáticos, así como eliminar estereotipos y prejuicios de género. Con respeto a las madres se trabaja con ellas para que aprendan a identificar señales de alarma previas a la reproducción de conductas violentas por parte de los menores, a mejorar las relaciones entre madre e hijo y a orientar sobre las pautas educativas más adecuadas dada la edad evolutiva de los menores.

Este servicio, que el IAM presta desde 2009, realizó de enero a junio en la provincia de Málaga 384 sesiones de terapia individual a menores, así como 33 sesiones de terapia familiar y 115 sesiones de asesoramiento a las madres, según han informado desde la Junta de Andalucía a través de un comunicado.

Según un informe elaborado por el defensor del menor de Andalucía en colaboración con el Gobierno andaluz, el 65 por ciento de las mujeres víctimas de violencia de género tenían menores a su cargo cuando fueron maltratadas por sus parejas.

Los menores también son víctimas

Estos menores son víctimas de dicha violencia, y pueden sufrir consecuencias psicológicas, emocionales, sociales, cognitivas y físicas. A ello se le añade los problemas derivados del derecho del maltratador a los regímenes de visita o la forzada mediación familiar, que pueden dar lugar a que el menor se convierta en víctima directa una vez más, pero en este caso como instrumento de daño del agresor hacia la madre.

A este programa de Atención Psicológica se une también la asistencia del IAM a través de sus casas de acogida y centros de emergencia, donde en este primer semestre fueron atendidos 86 menores.

Asimismo, el IAM ha logrado que el recién renovado Procedimiento de Coordinación Institucional para la Actuación ante la Violencia de Género en Andalucía, firmado por agentes sociales y Gobierno central, incluya a los y las menores como víctimas directas, lo que supone un importante paso, al hacerlos visibles y por tanto sus necesidades.

Esta iniciativa se incluye en el Pacto Andaluz por la Igualdad de Género, elaborado de forma conjunta por la Junta de Andalucía y el tejido asociativo, y donde la Junta se compromete a favorecer que los Juzgados de Violencia suspendan cautelarmente el régimen de visitas en los casos en que las víctimas se encuentren en centros de acogida por motivos de seguridad.

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