La Asociación Unificada de Pequeños Accionistas (Aupa) del Racing de Santander exige que se actúe "ya" y "desde todos los ámbitos" contra el Consejo de Administración del club, para acabar con la "desvergüenza que mancilla" el "noble nombre" del club, iniciar su "regeneración" y evitar que se "muera".

En un comunicado, Aupa exige respuestas y soluciones a los políticos, al poder judicial, a los acreedores del Racing y a los órganos deportivos, tras confirmarse las "triquiñuelas" de los directivos para tratar de modificar la clasificación final y que el conjunto verdiblanco permaneciera en Segunda División.

Tras este hecho y las "extrañas" situaciones que llevan dos años denunciando, los accionistas minoritarios instan a la clase política a buscar una solución al Racing "al margen de partidismos", utilizando su "influencia" y representatividad.

En este sentido, apuntan que "el Racing está como está" por la "lamentable" gestión que, a juicio de Aupa, se realizó en Zurich y por "mirar para otro lado" después. Ante esto, los pequeños accionistas piden "unidad de acción" y "firmeza contra la desvergüenza".

"Es necesaria una denuncia pública contundente, unitaria, real y efectiva. Hoy mejor que mañana. Motivos sobran", sentencia Aupa, antes de añadir que el Consejo "ha dilapidado dinero público con aparente inmunidad y ni siquiera se ha actuado".

Por otro lado, piden al poder judicial que actúe, y recuerdan al respecto que el año pasado ya se avisó de los "riesgos" que el tipo de gestión elegido por el Racing tenía. Pero, como lamentan, la demanda "cayó en saco roto".

A ello se suma que desde el pasado mes de diciembre está pendiente de resolverse la querella penal interpuesta en la que se piden medidas cautelares que eviten el actual "caos", querella a la que la propia fiscalía otorga verosimilitud. "El daño causado es ya irreparable, pero se puede atenuar si hay celeridad en la toma de decisiones", sostienen desde Aupa.

Mientras, a los acreedores y a sus representantes en el Comité de Seguimiento del Convenio, el colectivo de accionistas minoritarios les recuerda que con "engaños, mentiras y subterfugios" -lo que, a su entender, usa el Racing en la actualidad- "no hay visos de tener garantías de cobrar la deuda".

Añade al respecto que la actual directiva "incumple" el convenio "a sabiendas", lo que "pone en peligro el futuro de todos". Por ello, reclaman que un administrador judicial garantice el cumplimiento del convenio.

Finalmente, a los órganos deportivos Aupa les exige que "no consientan ni un segundo más" la permanencia del "mullidor" de la situación en que se encuentra el club en "tronos" representativos. "Una persona sobre la que pesa la destrucción de los valores deportivos del Racing, no puede seguir representando a nadie", apostillan.

Tras recordar que el club entró hace dos años en concurso de acreedores, Aupa lamenta que no se pidiera la dimisión de quienes "llevaron el Racing a la ruina". "Dos años después -señala- el balance es desolador; continúan mandando los mismos que se permitió continuaran, los acreedores aceptan condescendientes las trolas de los trileros y la judicatura no es tan veloz ni displicente con el viejo representativo".

"El Racing se muere ante el descrédito generalizado a su gestión", concluye el comunicado de Aupa, que reclama "dignidad y justicia para empezar la regeneración".