Irache advierte que los monitores de deportes de aventura deben tener el título de la actividad además del de socorrista

La Asociación de Consumidores de Navarra Irache ha advertido de que los monitores de deportes de aventura deben contar con el título propio de la actividad, además del de socorrista. Asimismo, ha destacado que las empresas deben contar con un seguro de responsabilidad civil de 600.000 euros por siniestro y con otro que cubra gastos de un posible rescate.
Deportes de aventura
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EUROPA PRESS
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La Asociación de Consumidores de Navarra Irache ha advertido de que los monitores de deportes de aventura deben contar con el título propio de la actividad, además del de socorrista. Asimismo, ha destacado que las empresas deben contar con un seguro de responsabilidad civil de 600.000 euros por siniestro y con otro que cubra gastos de un posible rescate.

Irache, que ha destacado que los deportes de aventura adquieren cada vez más protagonismo como alternativa de ocio y el verano es una época especialmente propicia para practicarlos, ha insistido en que "es conveniente realizarlos con todas las garantías de seguridad necesarias".

En una nota, Irache ha señalado que el Decreto Foral 288/2004 establece que los monitores de las empresas que organizan actividades de este tipo deben contar con el título exigido para la actividad, así como el de socorrista o de primeros auxilios. Asimismo, el número de monitores o instructores deberá ser suficiente para prestar el servicio en las debidas condiciones de calidad y seguridad, ha apuntado la asociación.

Por otro lado, Irache ha subrayado que estas empresas deben contar con un seguro de responsabilidad civil con una cobertura mínima de 600.000 euros por siniestro y una franquicia máxima de 600 euros, con el objeto de cubrir los posibles riesgos de la actividad. Además, deberá contarse con otro seguro de asistencia entre cuyos riesgos deberá comprender los gastos de rescate, éste sin ninguna franquicia.

En cuanto a los equipos y el material, la agrupación de consumidores ha explicado que deberán estar homologados y reunir las condiciones de seguridad y garantías para su uso. Por ello, si éstos son aportados por el usuario, las empresas deberán comprobar que reúnen las condiciones necesarias para la práctica de la actividad.

Por otra parte, para que los menores de edad puedan participar en la actividad, se requerirá, según Irache, la autorización previa y por escrito de quienes ostenten la patria potestad o tutela legal del menor o bien la presencia de un adulto que se responsabilice de él.

Antes de iniciar la actividad, los monitores repasarán con los clientes las normas de autoprotección y de seguridad así como las instrucciones sobre el respeto al medio natural, ha expuesto la asociación, que ha precisado que deberán, además, llevar un aparato de comunicación para mantener contacto con los servicios públicos de emergencias y rescate y con los responsables de la empresa para avisar en caso de accidente, así como un botiquín de primeros auxilios.

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