El artista y la modelo

Dentro de la espaciada carrera de Fernando Trueba, El artista y la modelo es una película plena. El proyecto, largamente acariciado por el director madrileño, empezó a fraguarse con la entrada del mítico guionista Jean-Claude Carrière (su Exercice du scénario es de lectura obligada para todos los que aspiran a escribir audiovisuales), y con la concurrencia posterior de toda una serie de talents agrupados bajo el auspicio totémico del gran Jean Rochefort: no gafó el francés esta vez la empresa, a diferencia de lo que ocurriera en The Man Who Killed Don Quixote, el proyecto maldito de Terry Gilliam. Más bien al contrario, pero cierto es también que el mayor de los Trueba aprendió hace tiempo a respetar los rigores presupuestarios que exige cualquier producción cinematográfica, por pequeña que ésta sea. Lo de la dirección de actores le viene de nacimiento, como ya quedara demostrado en su seminal cortometraje El león enamorado, pieza en la que se empezaban a vislumbrar algunas de las constantes estilísticas y argumentales que después ha desarrollado en su filmografía como director, productor y guionista.

Pero en El artista y la modelo hay diferencias sustanciales: no se trata, para empezar, de una película excesivamente dialogada. Pesan más los silencios, las miradas y los planos de detalle que hablan por el todo, como en el cine de su añorado amigo Robert Bresson. Aunque esta economía expresiva, de plano-contraplano muchas veces, no se priva del aliento poético que proporciona la naturaleza, por medio de esa luz que se filtra en el estudio y a través de esas ventanas que, como en Belle époque, se abren hacia el exterior. La película desemboca además en un encuentro entre lo viejo y lo nuevo, no sólo delante de la cámara, sino también por detrás: de esta manera, el aprendizaje entre la pequeña salvaje Aida Foch y sus maestros Rochefort y Cardinale obtiene su reflejo backstage en el vívido intercambio de conocimientos que se produjo entre el maestro Trueba y el novel director de fotografía (y primer operador de cámara) Daniel Vilar, quien encontró el evanescente look de la película en la combinación del último grito en Alta Definición (la cámara Alexa de Arri) con las ópticas antiguas que, por ejemplo, utilizó Coppola en El Padrino, o Alfred Hitchcock en Los pájaros. Por todo ello, El artista y la modelo nace como clásico y moderno.

VEREDICTO: Trueba ya tiene su pequeña master piece sobre el proceso de creación artística.

FICHA TÉCNICA

El artista y la modelo

• Director:
• Género:

  Drama

• País:
• Sinopsis:

  Un viejo escultor de la Francia ocupada de 1943 reencuentra las ganas de volver a crear obras de arte gracias a la llegada de una joven modelo española que busca refugio.

• RESUMEN: Después de ‘Chico y Rita’, un motivo clásico con talla moderna.

• ESTRENO: 28/09/2012

• [L'artiste et son modèle] Drama / España, Francia / 2012 / Dir: Fernando Trueba / Reparto: Jean Rochefort, Aida Folch, Chus Lampreave, Götz Otto, Christian Sinniger, Claudia Cardinale / Guión: Fernando Trueba, Jean-Claude Carrière