El consejero de Salud y Servicios Sociales, José Ignacio Nieto, ha informado, acompañado de la jefa de la sección de Aparato Digestivo del San Pedro, Begoña Sacristán, sobre una nueva técnica diagnóstica que se utiliza ya en el Hospital San Pedro en pacientes con enfermedades hepáticas y que permite establecer el grado de fibrosis que sufren en este órgano de una forma segura, rápida e indolora.

Nieto ha subrayado la importancia de esta nueva técnica, llamada elastografía hepática y comercializada con el nombre de Fibroscan, señalando que podrá utilizarse en el diagnóstico y seguimiento de enfermedades hepáticas como hepatitis B, hepatitis C, hemocromatosis, hepatitis autoinmune y aquellas producidas por abuso de alcohol o por depósito de grasa, entre otras; "enfermedades muy frecuentes y con una morbimortalidad importante en nuestra región", ha señalado.

Según los cálculos elaborados desde la sección de Aparato Digestivo del Hospital San Pedro, esta nueva técnica no invasiva podrá ser utilizada en aproximadamente unos 500 pacientes riojanos al año. La consulta específica de patología hepática del Hospital San Pedro atendió el año pasado a unos 2.300 pacientes, 260 de ellos nuevos.

50 ATENDIDOS

Sacristán ha apuntado que con la nueva técnica, puesta en marcha hace un mes, se han atendido ya a 50 personas. Ha destacado que supone "en la mayoría de los casos de sustituir a la biopsia hepática".

Las enfermedades hepáticas producen inflamación en el hígado, a la que sigue un proceso de cicatrización y fibrosis de los tejidos, que puede extenderse por todo el hígado de manera progresiva, hasta trasformarlos en rígidos y provocando cirrosis. El pronóstico del paciente y el tratamiento más adecuado dependen en gran medida del grado de fibrosis del tejido hepático.

Para conocerlo, hasta ahora, se realizaba una biopsia hepática que consiste en la obtención de tejido hepático para su posterior análisis. El tejido se obtiene pinchando al paciente con una aguja que penetra hasta el hígado, atravesando la cavidad torácica a través del espacio intercostal. Se trata de una técnica invasiva que requiere ingreso hospitalario, produce dolor en el 80% de los casos y puede tener complicaciones. Además, el fragmento que se obtiene es muy pequeño y por ello la medición de la fibrosis puede ser errónea.

No invasiva

Sin embargo, en el Hospital San Pedro, la biopsia hepática se ha sustituido ya, siempre que sea posible, por la elastografía hepática, "una técnica no invasiva que no requiere ingreso hospitalario, evita molestias al paciente, reduce riesgos y ofrece al profesional información más precisa", según ha detallado Nieto.

El aparato dispone de una sonda emisor-receptor y un ordenador que procesa la información y genera una imagen de la onda elástica y el valor de la rigidez hepática. La sonda emite dos tipos de ondas, una onda pulsátil vibratoria que penetra en el hígado y una onda de ultrasonidos que capta la velocidad a la que se propaga la primera onda La velocidad es más rápida cuanto mas rígido es el hígado.

La maquina procesa la información y genera en una pantalla de video una imagen de la onda elástica con el calculo de la rigidez hepática, que es proporcional a la cantidad y extensión de la fibrosis

La técnica permite clasificar a los pacientes según el estadio de fibrosis de su hígado, lo que ayuda al médico a elegir de forma más precisa y certera el tipo y momento del tratamiento. Además, sirve para el estudio de la hipertensión portal que es una complicación de la cirrosis y requiere de un tratamiento específico.