La consellera de Bienestar Social y presidenta del Institut Mallorquí d'Afers Socials (IMAS), Catalina Cirer, ha asegurado que no dimitirá tras el cierre de la Asociación de Familiares con Alzheimer de Mallorca (AFAM), tal como piden desde la oposición porque "no depende de una mala gestión del Consell de Mallorca".

En declaraciones a Europa Press, Cirer ha señalado que la oposición tiene "todo el derecho del mundo" a pedir su dimisión, y aunque respeta "profundamente" esta petición no la comparte porque, según ha aseverado, "no se fundamenta en un hecho real".

Cirer ha destacado que lamenta la decisión de la Junta Directiva de cerrar AFAM, relacionada con una serie de problemas por el pago de sanciones, y, en este sentido, ha resaltado que este jueves se tenían que reunir con ésta para tratar el asunto. "Aún así, ha matizado, continuaré las relaciones con AFAM".

Así, ha detallado que el Consell se encuentra en un "proceso de entendimiento" con la asociación para que se pueda hacer frente a los pagos derivados de esta multa y, ha añadido, "si el PSIB quiere utilizar esta situación como excusa para pedir mi dimisión, está en su derecho, pero no comparto su criterio".

En este sentido, ha resaltado que la entidad cierra por causas "no imputables a la responsabilidad del Consell de Mallorca, ya que si existe una denuncia la Administración tiene que actuar". "El cierre no es imputable a una mala gestión nuestra, sino al revés", ha agregado.

Según ha expresado la consellera de Bienestar Social, "dije que dimitiría si alguna entidad tiene que cerrar por causas imputables a mi gestión, pero las sanciones no se establecen ni por mi capricho ni voluntad, sino porque no se han hecho las cosas como tocan".