Un jurado de expertos y las más de 360.000 personas que han votado a las 85 iniciativas participantes han otorgado el 'Premio Romper Barreras' al vallisoletano Pelayo Martín, en la categoría individual, por su innovación en materia de accesibilidad informática, y a la escuela barcelonesa Escola d'Educació Especial l'Arboç, por sus esfuerzos en la aplicación de la tecnología para ayudar a niños con distintos tipos de discapacidades, según han explicado los impulsores del galardón, Toshiba, Microsoft y BJ Adaptaciones.

El ganador del premio en la categoría individual, que padece aciduría glutárica de tipo I, ha adaptado una cámara web que emplea como interfaz de entrada en un ordenador y le permite controlar el mismo, además de mover un robot lego y ejecutar una serie de movimientos.

Por su parte, la escuela barcelonesa ha sido elegida para el primer premio colectivo por su esfuerzo por "idear, desarrollar y obtener herramientas tecnológicas" para niños con distintas limitaciones funcionales y discapacidades, con el fin de conseguir que tengan la máxima autonomía posible, dentro y fuera de la escuela, en los ámbitos de la comunicación, control del entorno y la informática.

El galardón ha recaído también, en la categoría colectiva, sobre la Organización Mater Misericordia, en Mallorca, y, en la categoría individual, sobre Jairo Ruiz-León Arroyo, de Ciudad Real. Ambos han obtenido el segundo premio 'Romper Barreras'.

Las dos asociaciones y los dos particulares elegidos como ganadores del galardón se repartirán un total de 18.000 euros en premios, que incluyen una dotación en metálico y diversos paquetes de productos Toshiba y BJ Adaptaciones, según han indicado.

Además, el jurado ha concedido de forma extraordinaria otros seis diplomas a María Nabila Ortega (Las Palmas), María Sánchez (Mallorca), María Alcántara (Barcelona), Aspace Oviedo (Asturias), Atenpace (Madrid) y a la Asociación Gato de 5 Patas (Madrid), con el fin de reconocer la labor que todos ellos han realizado en materia de tecnología y discapacidad.

En este sentido, el jurado ha destacado la calidad de los proyectos presentados, que este año han duplicado el número de candidaturas frente a otras ediciones, así como la "gran dificultad para elegir a los ganadores. Así, han destacado que es una buena muestra de que "los premios cumplen su cometido", que no es otro que "impulsar el uso de las TIC para solucionar los problemas de dependencia de personas con discapacidad, dar visibilidad a estas herramientas y generar en la sociedad un interés por ellas".