El Estado registró hasta junio un déficit de 40.001 millones en términos de contabilidad nacional, equivalente al 3,81% del PIB, lo que supone un 8,2% menos que el registrado en el mismo periodo de 2012.

Este dato del 3,8% equivale al objetivo previsto para el cierre de este año. Hay que recordar que a principios de julio el Gobierno modificó sus previsiones de déficit, estableciéndolo en el 6,5% global en este ejercicio. La Administración central tendría un 3,8% de este desfase presupuestario, mientras que las comunidades tendrían un 1,3% y la Seguridad Social un 1,4%.

Según los datos difundidos por el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas, este saldo es consecuencia de unos ingresos (recursos no financieros) de 49.528 millones, el 12% más que un año antes, y de unos gastos (empleos no financieros) de 89.529 millones, el 2% más.

El Ministerio destaca que el déficit del Estado recoge un gasto en intereses de la deuda pública por importe de 13.984 millones de euros, un 14,4% más que en el mismo periodo de 2012. Sin tener en cuenta dicha carga financiera, se ha obtenido un déficit primario de 26.017 millones de euros, inferior en un 17% al del año anterior.

En el aumento de los gastos también ha influido el crecimiento de las pensiones y de las trasferencias a la Seguridad Social.

La mayoría de los recursos no financieros, 43.214 millones, se corresponden con los ingresos fiscales, impuestos y cotizaciones, lo que supone el 4,8% más que en junio de 2012. Los ingresos por impuestos han aumentado el 4,7%, hasta 37.294 millones, en tanto que los provenientes de cotizaciones han crecido el 5,5 %, hasta 5.920 millones. El IVA, con 12.248 millones, ha aumentado el 16,9% por la subida de tipos, en tanto que los demás impuestos sobre la producción y las exportaciones han crecido el 14,9%, hasta 4.820, debido a los recursos procedentes de la fiscalidad medioambiental, el impuesto sobre el carbón y el impuesto especial sobre hidrocarburos.

Los impuestos sobre la renta y el patrimonio han ascendido a 20.153 millones, el 3,6% menos, como consecuencia de las devoluciones de ejercicios anteriores derivadas de recursos judiciales, así como por el descenso de las retenciones del capital mobiliario. Las rentas de la propiedad han sido de 3.956 millones, con un aumento del 61,1% que se debe tanto a los ingresos por intereses del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA) que ascienden a 530 millones de euros, sin correspondencia en el año anterior, como a los dividendos y participaciones en beneficios del Banco de España que han registrado un aumento del 83,83% respecto a 2012.

El aumento de los gastos viene determinado por la subida del 1,7% de los empleos corrientes como consecuencia fundamentalmente de la mencionada evolución de los intereses de la deuda. También ha aumentado el gasto en prestaciones sociales, que se ha elevado a 6.101 millones, de los que 5.910 millones corresponde a las pensiones de las clases pasivas, el 5,6% más. Los incrementos se han compensado con el descenso del 3,1% de las trasferencias corrientes entre las Administraciones Públicas, hasta 46.071 millones, consecuencia de las menores trasferencias a las comunidades autónomas que han pasado de 18.593 millones hasta junio de 2012 a 15.141 millones un año después.

No obstante, han aumentado un 8,2% las trasferencias a las administraciones de la Seguridad Social (20.883 millones), de los que 11.240 millones (4.303 millones más que en 2012) han sido para el sistema de Seguridad Social y 9.643 millones (2.717 millones menos) para el Servicio Público de Empleo Estatal. La remuneración de asalariados ha sido de 9.803 millones, un gasto inferior en un 1,5% al de junio de 2012.

La Seguridad Social tuvo un superávit hasta junio de 9.832 millones de euros (0,94 % del PIB), un 15,47% más que en el mismo periodo del año anterior, debido principalmente a los recursos aportados por el Estado, que sumaron 11.914 millones de euros.

Los datos de ejecución presupuestaria del primer semestre del año arrojaron este saldo positivo frente a los 8.515 millones obtenidos hasta junio de 2012. Los 9.832,29 millones de euros de superávit resultan de la diferencia entre unos derechos reconocidos por operaciones no financieras de 64.649,96 millones de euros, que aumentan un 4,56 %, y unas obligaciones reconocidas de 54.817,67 millones de euros, que crecen en un 2,81 % en relación al mismo periodo del año anterior.