Dos de los cuatro ciudadrealeños que viajaban en el tren siniestrado en Santiago de Compostela son familiares del concejal de Seguridad del Ayuntamiento de Ciudad Real, Guillermo Arroyo, según han confirmado a Europa Press fuentes municipales.

Uno de los familiares se encuentra herido fuera de peligro —está hospitalizado con quemaduras— mientras que el otro está desaparecido. Ambos viajaban a Santiago en compañía de una mujer joven natural de Valdepeñas, que es novia del herido —identificado como I.F.— e hija del desaparecido, de cuyo paradero todavía no se sabe nada.

El primer edil de Valdepeñas, Jesús Martín, ha confirmado, durante la concentración ante el Ayuntamiento convocada por las víctimas, que la joven, identificada como M.J.C., de 30 años de edad, aún no ha contactado con sus familiares ni tampoco está en la lista de fallecidos.

Martín ha pedido prudencia y tranquilidad porque no se puede decir "que haya tenido un trágico final". "Sólo sabemos que en el caos que se ha creado, han tenido que distribuir a las personas en diferentes hospitales y alojamientos. La voluntariedad y necesidad de la gente ha hecho que los ciudadanos se ocupen de las personas sin saber quienes son. A lo mejor ella está en un albergue u hospital y, después del shock, está aturdida y no lleva la documentación encima tras la situación dantesca que se ve en las imágenes", ha dicho.

"No nos podemos poner en lo peor", ha indicado el alcalde de Valdepeñas, que ha pedido paciencia al tiempo que ha deseado que M.J.C. esté "bien" y se reencuentre pronto con su familia, "que está pasando unas horas de angustia que no nos podemos imaginar".

En el convoy viajaba igualmente una cuarta persona de Ciudad Real, que también ha resultado herida en el accidente. La alcaldesa de Ciudad Real, Rosa Romero, está manteniendo contacto con los familiares de todos estos ciudadrealeños que viajaban en el tren.