UGT y CCOO se reunirán este jueves con la patronal de las ambulancias en el Tribunal de Arbitraje y Mediación de Baleares (Tamib) con el objetivo de alcanzar un acuerdo sobre el convenio colectivo del sector que evite la huelga prevista para los próximos días 25, 29 y 31 de julio -entre las 11.00 y las 13.00 y entre las 15.00 y las 17.00 horas-, una protesta que se convertiría en indefinida a partir del próximo 2 de agosto.

La huelga afecta a todo el sector de las ambulancias de la comunidad, tanto urgentes como programadas y privadas y públicas, y, por tanto, a entre 600 y 750 trabajadores de las islas, han calculado entre conductores y ayudantes.

Por otro lado, estas protestas podrían afectar a alrededor de 3.500 personas, quienes a diario acuden a consultas o rehabilitación, si bien el servicio de urgencias y emergencias durante estos periodos quedará "completamente garantizado".

Según informaron los sindicatos en rueda de prensa, el preaviso de huelga fue registrado después de que se hayan reunido hasta en cuatro ocasiones con la parte empresarial para la negociación del convenio colectivo en el que los sindicatos, han dicho, únicamente reclamaban "mantener el mismo convenio tenido hasta ahora" e incluir un capítulo sobre igualdad.

El secretario general de la Federación de Servicios a la Ciudadanía de CCOO, Pep Ginard, ha explicado que el convenio autonómico del sector acabó su vigencia el pasado 31 de diciembre de 2012 y que, desde el pasado 2 de julio, la empresa representada por dos patronales posee las reivindicaciones de los sindicatos, que consisten en el mantenimiento de las condiciones tenidas hasta ahora y la aplicación de la Ley de Igualdad.

Ginard, quien ha destacado que son conscientes de que las ambulancias representan un servicio "esencial y público con impacto" en la sociedad, ha indicado que en la reunión de este jueves en el Tamib esperan alcanzar "un punto de equilibrio porque entre lo que dice el sentido común y lo que pedimos no hay mucha diferencia".

Por su parte, el secretario de Acción Sindical de la Federación de Transportes de UGT, Javier Marín, ha criticado que la patronal no se haya "movido ni un milímetro" en su postura durante las diferentes reuniones y ha asegurado que plantean "llevar los salarios al 2011", no pagar los atrasos que se habían generado, establecer un dispositivo de localización para que los trabajadores estén disponibles durante las 24 horas del día.

Además, ha reprochado que la parte empresarial pretenda establecer un recorte del 11,5 por ciento en todos los conceptos, la implantación de jornadas irregulares de entre un 50 y un 70 por ciento, eliminar la antigüedad y los tres días que actualmente tienen por asuntos propios. También, ha lamentado que se incluya un punto que recoge "otros supuestos de interés para las patronales" que no les han especificado en qué consiste.