El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, ha recibido este martes en el Ayuntamiento a algunos de los niños saharauis que han viajado a la capital para pasar el verano dentro del proyecto 'Vacaciones en paz'. En total, se trata de 20 menores, con edades comprendidas entre los ocho y los 12 años, que serán acogidos durante los meses de julio y agosto por familias malagueñas.

De la Torre, al que han obsequiado con una camiseta y una revista editada para recaudar fondos para el proyecto Encuentros Internacionales de Arte del Sahara Occidental ARTifariti, ha mostrado su gratitud a las familias que "durante un amplio número de semanas abren las puertas de sus casas y hacen a los niños partícipes de su vida y de la diversión, pudiendo disfrutar más de aspectos como el agua".

El primer edil malagueño, acompañado por miembros no sólo del equipo de gobierno del PP, sino también de los grupos de la oposición, PSOE e IU, ha confiado en que "estos niños siempre tengan de Málaga el recuerdo de una tierra hospitalaria, acogedora y amable".

Por su parte, Abdelahe Hamad Jalil, representante de la Delegación Saharaui para Andalucía, presente también en este acto, ha agradecido la solidaridad del Consistorio malagueño y de las familias acogedoras.

Ha aprovechado para denunciar "la represión en las zonas ocupadas por el régimen de Marruecos" y ha hecho un llamamiento a los políticos y al Gobierno español para "dar un paso adelante para presionar al que está en contra de la democracia y reprime al pueblo saharaui". También ha pedido a los ciudadanos que no dejen que esta causa "caiga en el olvido".

Finalmente, la presidenta de la Asociación Malagueña de Amigos del Pueblo Saharaui, Isabel González, al igual que Abdelahe Hamad, ha advertido de la situación de "emergencia alimentaria" por la que atraviesa este pueblo, al tiempo que ha agradecido la colaboración del Ayuntamiento de Málaga.

"El pueblo saharaui necesita esa ayuda para poder subsistir", ha señalado, haciendo hincapié, además, en que "detrás debe haber un respaldo institucional para que el conflicto se resuelva y estos niños, que representan hoy el sufrimiento de su pueblo, no tengan que venir a Andalucía como refugiados, sino como niños libres".

Estos niños empezaron a llegar, junto al resto de los menores de toda Andalucía, al aeropuerto de Málaga el pasado 25 de junio, procedentes de los campamentos de la población refugiada saharaui en Tinduf (Argelia).

Mejorar la calidad de vida

Este programa profundiza en las relaciones de amistad del pueblo andaluz con el saharaui, además de mejorar la calidad de vida, tanto sanitaria como alimenticia, de esta población infantil. Estos niños están obligados a sobrevivir exiliados junto a sus familias, unas 200.000 personas en total, desde hace 36 años en campamentos de refugiados.

Durante su estancia, amplían y completan los conocimientos educativos que adquieren en los colegios en los campamentos de refugiados, intentado paliar el desconocimiento de las condiciones del desarrollo moderno, con el fin de que tengan una concepción del mundo lo suficientemente amplia y sólida, dentro de su proceso de maduración personal, y todo ello sin apartarlos de la rica tradición de su pueblo.

Desde hace varios años, el Ayuntamiento, a través del Área de Participación Ciudadana, Inmigración y Cooperación al Desarrollo, participa en la realización de este proyecto. Este año ha aportado al mismo 8.000 euros.