'Pastoreo y desbroce de matorrales en Cameros Viejo' analiza el plan de 2001 del Gobierno riojano para este problema

El libro 'Pastoreo y desbroce en Cameros Viejo', nuevo título editado por el IER que supone la trigésima publicación dentro de la colección 'Ciencias de la Tierra', reflexiona sobre las ventajas que representan para esta zona tanto la ganadería extensiva como las políticas de desbroce y conservación de áreas montañosas.
El consejero Nagore, uno de los autores y representantes del IER con el libro
El consejero Nagore, uno de los autores y representantes del IER con el libro
EUROPA PRESS
El consejero Nagore, uno de los autores y representantes del IER con el libro

El libro 'Pastoreo y desbroce en Cameros Viejo', nuevo título editado por el IER que supone la trigésima publicación dentro de la colección 'Ciencias de la Tierra', reflexiona sobre las ventajas que representan para esta zona tanto la ganadería extensiva como las políticas de desbroce y conservación de áreas montañosas.

El consejero de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente, Íñigo Nagore, ha presentado esta mañana el libro junto a uno de los autores, Teodoro Lasanta, y altos representantes del Instituto Riojano de Estudios (IER). Tiene un precio de 15 euros y podrá ser adquirido en múltiples puntos de venta como la librería de estudios riojanos.

Las sierras riojanas y especialmente el Camero Viejo, son unas zonas que "estuvieron muy explotadas, con gran superficie de cultivo y mucha densidad ganadera hasta mediados de los años 50 del siglo pasado, cuando hubo una inmigración impresionante y se fueron abandonando hasta tener una densidad de población bajísima hoy en día".

En consecuencia, los matorrales fueron ganando terreno a los pastos, con el consiguiente aumento del riesgo de incendios, hasta que en 2001 el Gobierno de La Rioja comenzó una campaña de desbroce para disminuir este peligro y rehabilitar zonas dedicadas al pastoreo para recuperar parte de la antigua actividad de estas áreas montañosas.

Para uno de los autores, Teodoro Lasanta, este plan "da respuesta a una problemática que afecta a todas las montañas mediterráneas e incluso a todas las de Europa Occidental y Estados Unidos; pasaron de estar ocupadas de forma muy intensiva, con una densidad demográfica y ganadera importante, a ser zonas totalmente marginales".

Desde que comenzó esta campaña, junto a otras pequeñas iniciativas previas, el Gobierno riojano "ha actuado en una superficie de casi 30.000 hectáreas, un 22 por ciento de toda la superficie de matorrales de La Rioja y un casi un 11 por ciento de la superficie de nuestras sierras".

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