Imputadas 22 personas en una operación que ha permitido localizar más de 100 toneladas de piñas robadas

La Guardia Civil ha imputado a 22 personas en el marco de una operación desarrollada en las provincias de Valladolid y Zamora y en la que se ha logrado recuperar más de 100 toneladas de piñas robadas.
Operación 'Tauro'
Operación 'Tauro'
G.CIVIL
Operación 'Tauro'

La Guardia Civil ha imputado a 22 personas en el marco de una operación desarrollada en las provincias de Valladolid y Zamora y en la que se ha logrado recuperar más de 100 toneladas de piñas robadas.

En concreto, la operación 'Tauro' ha permitido imputar a 22 personas de nacionalidades rumana, búlgara, española y marroquí, integrantes de una red dedicada al robo de piñas.

Asimismo, se han descubierto más de 100 toneladas de piñas de procedencia ilegal y se han esclarecido numerosos hechos delictivos cometidos en diferentes provincias de Castilla y León (receptación, hurtos, robos, falsedad documental y apropiación indebida), han informado a Europa Press fuentes de la Guardia Civil.

Las investigaciones son continuación de las campañas anteriores de sobre delitos y faltas contra el patrimonio, consistentes en hurtos y robos de piñas piñoneras cerradas de 'Pinus pinea', destinadas al consumo humano que se cometen en diferentes localidades de la provincia de Valladolid, especialmente en la comarca Tierra de Pinares y en las provincias limítrofes.

Así, durante la campaña, se iniciaron investigaciones con el objeto de identificar a las personas y empresas que pudieran estar relacionadas con los mencionados robos así como el destino dado a las piñas sustraídas y "modus operandi" utilizado para validar estas operaciones.

En la anterior campaña, las acciones preventivas y de investigación se centraron en las delitos de robos o hurtos en los pinares así como la localización de los autores de estos hechos y los puntos donde efectuaban las ventas, dando como resultado 30 detenidos/imputados y la intervención de 150.000 kilos de piñas de dudosa procedencia.

Durante la presente campaña se ha mantenido la labor operativa con el apoyo de las unidades territoriales de la Guardia Civil, si bien no se han detectado grandes acumulaciones de piña en almacenistas intermediarios, por lo que el equipo de investigación del Seprona de la Guardia Civil ha desarrollado una la labor de investigación y ha mantenido entrevistas con diferentes personas relacionadas con el sector de la piña.

Ventas en peñafiel y toro

Las informaciones obtenidas han confirmado, a priori, la existencia de al menos dos posibles cauces para las piñas sustraídas, uno que se dirigiría a la zona de Peñafiel y, por otro lado, y valorado como de mayor entidad por el volumen manejado, a la zona de Toro (Zamora), donde las piñas sustraídas por personas de diferentes nacionalidades (rumanos, búlgaros, marroquíes y españoles) aparentemente inconexas entre sí, se venderían a diferentes piñeros de esta localidad.

Tanto a la información básica de la que se disponía como al trabajo operativo, vigilancias, apostaderos, otras acciones de investigación así como un exhaustivo análisis de la información reunida, se ha ido escalando desde los pequeños robos y hurtos en pinares de Castilla y León, principalmente en pinares de Valladolid, Zamora hasta los almacenes de intermediarios.

Fruto de este trabajo, el Seprona de la Guardia Civil de Valladolid se ha centrado en personas vecinas de la provincia de Zamora, y más concretamente de las localidades de Toro, Morales de Toro, Peleagonzalo y otros municipios colindantes con estos.

De esta forma, se han realizado numerosas inspecciones a establecimientos y se ha analizado exhaustivamente importante cantidad de documentación, autorizaciones y licencias de aprovechamiento, así como autorizaciones de titulares de parcelas, datos catastrales de propietarios, declaraciones de responsable de aprovechamientos, inscripciones en registros de empresas, etcétera.

Una vez obtenida esta documentación se ha procedido a cotejar los datos, uno a uno, con cada anotación de los libros registros de entradas de cada uno de los intermediarios inspeccionados, toma de declaración a todos los titulares de parcelas en los que existía algún documento de aprovechamiento, y se han comprobado estos datos con los originales de los que disponían el Servicio Territorial de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León en Zamora.

Algunas de estas personas disponían de la declaración responsable y presentaban una comunicación de aprovechamiento de piña cerrada en montes no gestionados por la Junta de Castilla y León (es decir, montes privados) a los agentes medio ambientales o guardias civiles que les sorprendieran en los pinares en el momento de obtener las piñas, incluso en algunos casos presentaban una autorización del titular de la parcela en la que supuestamente se encuentra recogiendo los frutos.

Ante la imposibilidad, a pie de pinar, de realizar las comprobaciones por parte de los agentes que los identifican tanto de la validez de la solicitud de aprovechamiento como de la veracidad de la autorización del titular, los individuos consiguen pasar ese primer filtro, de forma que se les permite trasladar las piñas recogidas a algunas empresas o piñeros, los cuales no tienen inconveniente en comprarlas, aún a sabiendas de que carecen de algún documento que ampare cada una de estas partidas o presentan claras deficiencias.

Falsificación de documentación

Algunas de las autorizaciones de aprovechamiento presentadas por diferentes personas se repiten hasta en tres ocasiones, sin que los propietarios hubieran autorizado a estas personas a coger las piñas de su pinar, por lo que los documentos y firmas habrían sido falsificados.

Este "modus operandi" supuestamente se ha realizado simultáneamente con diferentes comercializadores de piñas, documentando con las mismas comunicaciones de aprovechamiento y del titular de los pinares la venta de multitud de partidas de piñas, superando con creces las cantidades autorizadas de haber sido estas lícitamente obtenidas.

Una vez que las piñas eran recolectadas de forma ilegal y adquiridas posteriormente por los piñeros, éstas se enviaban en pequeñas partidas para hacer más difícil su seguimiento y evitar así ser detectadas o eran recogidas en sus propias instalaciones por parte de los grandes transformadores de piñones, principalmente de las localidades de Pedrajas de San Esteban, Íscar, Villaverde de Iscar, etcétera.

Estos transformadores registran y facturan estas partidas en sus libros, aunque desconocen la procedencia ilegal de las piñas, por lo que quedan así introducidas legalmente en el mercado ante las inspecciones realizadas por las administraciones implicadas.

En resumen, como consecuencia de la operación 'Tauro', hasta el momento se ha detenido a dos vecinos de Toro por delito de receptación; a otros cuatro de esta localidad, Peleagonzalo y Morales de Toro por delito de falsedad documental; se ha detenido a nueve personas como autores de delitos de apropiación indebida de más de 60.000 kilos de piñas; y a siete personas se las considera autoras de delitos de robo y/o hurto de más de 35.000 kilos de piñas. En total se han realizado diez inspecciones a comercializadores intermediarios y se han detectado numerosas infracciones administrativas.

La Guardia Civil de Valladolid, en el cierre de campaña de la piña, ha procedido a la detención o imputación de un total de 59 personas y ha recuperado más de 100 toneladas de piñas y esclareciendo múltiples hechos delictivos.

El Seprona instruye las correspondientes diligencias y, debido a la gran laboriosidad, continúan con las gestiones de investigación, sin que se descarte la imputación de algunas personas más por delitos de receptación.

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