La periodista y articulista de El País Gabriela Cañas ha mostrado su preocupación con el papel de los medios de comunicación en la actualidad. "La extrema debilidad en la que se encuentran perjudica la libertad de la sociedad. Los medios son víctimas de los ataques que está sufriendo el Estado del bienestar, como la verdad es víctima de la guerra", ha subrayado.

Cañas se ha pronunciado de este modo durante una entrevista concedida a Europa Press en el marco del curso de verano 'El futuro de la socialdemocracia a debate' en el que ha participado esta semana en la sede de Málaga de la Universidad Internacional de Andalucía (UNIA).

Así, ha analizado el por qué no existen protestas a raíz del cierre de medios. "En el fondo los buenos medios de comunicación son muy incómodos para la oligarquía, los empresarios, los poderes públicos. Por eso, cuando desaparece un medio, la gente tampoco se tira de los pelos", ha reflexionado la periodista.

En este sentido, Cañas ha declarado no ser partidaria de ayudas o subvenciones para salir de la crisis, pero sí ha dicho echar en "falta una cosa, que los poderes públicos se ponga coto a las amenazas que nos acechan como han hecho en otros países no permitiendo a Google que den nuestros contenidos en abierto", ha añadido.

Con respecto a los cambios experimentados en la televisión pública, ha dicho no entender "por qué se han cargado esa independencia del sistema político. Es una de las mayores pérdidas en el tema de la libertad de prensa y de la libertad de los medios públicos".

En relación con la práctica periodística, Cañas ha pronosticado que el periodismo "volverá a sus orígenes" en cuanto a la "calidad y la rigurosidad" y el público "volverá a buscar buenas fuentes de información y opinión". Ha concluido con este tema confesando que "el problema actual es que no somos capaces de hacer comprender, ni tenemos credibilidad para ello, que los medios son muy importantes para la sociedad".

La periodista también ha destacado las nuevas formas de comunicación como los blogs, que ha calificado como "complementos a las informaciones generales". A su vez, además ha defendido el formato digital, "pues lo impreso es un modelo que no tiene cabida en la actualidad. No puede subsistir mucho tiempo desde el punto de vista medioambiental".