Los representantes de la Confederación de Sindicatos Independientes de Cajas de Ahorros y Afines (Csica) han asegurado que hubo "presiones" a los empleados para la venta de participaciones preferentes y obligaciones subordinadas y ha defendido el papel de los trabajadores que las comercializaron entre ahorradores, puesto que lo hicieron "confiados en la solvencia de la entidad".

El sindicato ha estado representado por Luis Paz y Carlos Peso en la comisión de investigación de las cajas de ahorros que se desarrolla en el Parlamento de Galicia, en la que han trasladado su "total apoyo" a los trabajadores que colocaron estos productos. "Más allá de las presiones, que las hubo, estamos seguros de que no hubo ningún compañero que pensase que todo esto iba a derivar en una situación tan perjudicial para los ahorradores", ha afirmado Paz este lunes.

"Tanto es así que las compramos nosotros mismos y las vendimos a amigos y familiares", ha incidido y ha señalado que consideraban que se trataba de un producto que "sí que era líquido".

Paz ha justificado que los cambios en la dirección de Csica, cuyos actuales responsables se han alejado de anteriores posicionamientos, no les permiten dar información sobre los datos a los que tenían acceso los antiguos representantes.

En concreto, ha relatado que el representante elegido bajo sus siglas para el consejo de administración de Caixanova —Miguel Argones, al que no se ha referido por su nombre— ya no pertenece a esta organización y en su momento no consultaba el sentido de su voto ni informaba sobre el orden del día de las reuniones o sus posicionamientos en las mismas. Argones ha declarado en la causa abierta en la Audiencia Nacional contra cinco exdirectivos por las indemnizaciones millonarias.

La actual dirección, ha indicado Luis Paz, "jamás" ha tenido información de lo que se debate en los órganos de dirección y, en el caso de las indemnizaciones, ha dicho que conoce lo que ha aparecido publicado en los medios de comunicación. "Nos parecen fuera de toda lógica, desproporcionadas, amorales y el resultado de la gestión tampoco las justifica", ha manifestado al respecto.

La fusión y el futuro

Sobre los datos que tenía Csica respecto al estado de las cajas en el momento de la fusión, ha indicado que eran los que se hacían públicos y se exponían en las asambleas, después de haber sido auditados.

También ha puesto como contexto los cambios internos del sindicato para indicar que, aunque en su momento "destacados" representantes de Csica se manifestaron en contra de la fusión de Caixa Galicia y Caixanova, los actuales responsables no disponen de información que les hubiese permitido "apoyar más un SIP que la fusión gallega". En cualquier caso, ha considerado que las fusiones frías han desembocado también en situaciones "desgraciadas".

Preguntado sobre el futuro del banco nacido de la fusión de las cajas gallegas y su previsible venta —la información sobre que el FROB ha contratado bancos de inversión para las operaciones de NCG Banco y Calatunya Banc ha llegado durante las comparecencias de esta tarde en la comisión—, el representante de Csica ha considerado que sería "una enorme lástima" que "después de todo este tránsito" se pierda una entidad gallega.